La embajada de los Estados Unidos en Moscú pidió este martes a Rusia que libere a Alsu Kurmasheva, una periodista ruso-estadounidense de Radio Free Europe/Radio Liberty (RFE/RL), encarcelada la semana pasada y condenada recientemente a seis años y medio de prisión. La radio, financiada por losEstados Unidos, calificó como "una burla a la justicia", la decisión de Rusia.

Un tribunal de la ciudad sureña de Kazán reveló el lunes que había condenado a Kurmasheva por difundir información falsa sobre el ejército ruso en un juicio a puertas cerradas el viernes. El mismo día, otro tribunal encarceló al periodista estadounidense Evan Gershkovich durante 16 años, en un fallo que Washington también condenó como injusto.

Kurmasheva, madre de dos hijos, es una periodista radicada en Praga y estuvo detenida en su región natal de Tartaristán, Rusia, desde el 18 de octubre. Fue detenida inicialmente en junio cuando intentaba volar fuera de Rusia después de visitar a su madre y luego acusada de lo que inicialmente pareció una transgresión bastante menor antes de que los investigadores rusos abrieran un caso penal acusándola de difundir información falsa sobre el ejército ruso, algo que ella negó.

El marido de Kurmasheva, Pavel Butorin, quien también trabaja para RFE/RL, aclaró que la mujer no había hecho nada malo, pero que su juicio estaba relacionado con un libro que había editado titulado "Decir no a la guerra. 40 historias de rusos que se oponen a la invasión rusa de Ucrania". La embajada de los Estados Unidos en un comunicado el martes calificó a Kurmasheva como "una periodista de principios, comprometida inquebrantablemente con la verdad y la información objetiva" y aseguró que su encarcelamiento representaba "un día triste para el periodismo en Rusia".

"Una vez más pedimos a las autoridades rusas que liberen a Alsu y otros periodistas y presos de conciencia encarcelados, y que respeten las libertades fundamentales garantizadas por la Declaración Universal de Derechos Humanos y la Constitución de la Federación Rusa", afirmó la embajada. No hubo comentarios inmediatos del Kremlin, pero en el pasado deslizó que no estaba siguiendo el caso de Kurmasheva y que Rusia no está llevando a cabo una campaña dirigida a perseguir a ciudadanos estadounidenses.

Un portavoz de la Embajada de los Estados Unidos en Moscú comentó que la embajada estaba decepcionada de que las autoridades rusas hasta el momento no le hubieran concedido acceso consular a Kurmasheva. También anunció que seguiría solicitando dicho acceso, según un informe de la agencia de noticias Reuters.