Los estudiantes españoles regresaron desde hoy a las aulas de forma escalonada en medio de varios rebrotes de coronavirus, protestas de profesores y sindicatos por falta de medidas, inquietud de las familias y mensajes de confianza del Gobierno, que advirtió de sanciones a los padres que no envíen a sus hijos a clase.

En coincidencia con la reanudación de las clases presenciales, el Ministerio de Salud anunció hoy que España superó los 500.000 casos de coronavirus luego de sumar más de 26.500 desde el viernes pasado -los fines de semana no se suministran datos-, una media de más de 8.850 por día, en línea con los aumentos diarios de las dos últimas semanas.

"Sin que exista el riesgo cero, porque va a haber contagios, nuestros hijos, maestros y profesionales van a tener la garantía de estar en centros seguros", aseguró el presidente del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, en una entrevista televisiva, coincidiendo con el inicio del proceso de reapertura de los colegios.

Las regiones de Madrid y Navarra fueron las primeras en abrir algunos centros educativos para los más pequeños el viernes último, pero será entre hoy en el próximo lunes cuando se producirá el regreso masivo de los niños y adolescentes a las aulas en todo el país.

Cantabria, País Vasco, La Rioja, Valencia, Aragón y Murcia toman la delantera, mientras Cataluña y Canarias serán las últimas a partir de la próxima semana, cuando más de 8 millones de alumnos deberán volver a las escuelas cumpliendo con medidas sanitarias y de seguridad acordadas por la regiones y el Ministerio de Sanidad español.

España acumula ya 525.549 contagios de coronavirus y 29.516 muertes, según el balance de hoy del Ministerio de Salud.