Por Antonio D’Eramo

Ma Yun, conocido mundialmente como Jack Ma, de 59 años, fundador de la empresa de comercio electrónico Alibaba, un símil de Amazon o Mercado Libre de extremo oriente, posee una fortuna de 30.700 millones de dólares, según el índice de multimillonarios de Bloomberg.

Esta cifra es puesta en discursión por parte de otros reportes que siguen los vaivenes de las bolsas asiáticas, que la calculan en 23.500 millones de dólares.

Un patrimonio que se recortó desde que Jack Ma dejó la conducción de Alibaba en 2019 y su fortuna disminuyó aunque continúa obteniendo su riqueza de sus participaciones en la enorme compañía asiática.

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Su haber ha caído 3,1 mil millones de dólares desde que las acciones de la empresa alcanzaron un máximo de 122 dólares cada una en el pasado mes de enero luego que el gobierno de China aprobara un plan de financiación de Ant Group, una compañía de servicios tecnológicos financiera que estuvo involucrada en un escándalo luego que el carismático, ex profesor de inglés, Jack Ma, realizara, en 2020, mordaces comentarios acerca de los reguladores gubernamentales dirigidos por Xi Jinping, que le costó el veto de Beijing para que Ant Group cotice en la bolsa de Hong Kong.

Desde entonces, comenzó un pequeño ostracismo y un declive en el patrimonio de Jack Ma, que pasó de poseer una fortuna de 61.000 millones de dólares en 2020 a cerca de la mitad en la actualidad.

A pesar de ese descenso de su enorme fortuna nunca dejó de ser uno de los millonarios más seguidos por toda aquella persona interesada en los negocios y los emprendimientos.

Razón por la cual su reciente visita a Uruguay para interesarse por la pujante industria ganadera del vecino país y su reaparición en su propia patria indican que Jack Ma está de vuelta en los grandes negocios.

Back to business y la mira puesta en el país de las cuatro vacas por habitante

Las autoridades del gobierno de Luis Lacalle Pou se mostraron completamente sorprendidas por la visita del famoso empresario chino.  A pesar de controlar las oficinas de migraciones funcionarios del área económica estaban asombrados por el nivel de secretismo y bajo perfil, que Jack Ma imprimió a su visita, uno de los hombres de negocios que nunca pasan desapercibidos.

Sin embargo, el asombro de los empleados gubernamentales no es compartido por la comunidad de negocios uruguaya y, en particular, por aquellos empresarios ganaderos que han visto como han aumentado la cantidad de empresarios chinos, de rubros ajenos al sector cárnico, como en el caso de Jack Ma, que comenzaron a interesarse por el negocio de la carne y han elegido a Uruguay como su principal socio regional.

El mega millonario chino Jack Ma vuelve a los negocios

Y, esta elección tiene su razón de ser, porque desde que Uruguay decidió abrirse al mundo, su ganadería creció, generando ganancias por sus exportaciones y, en la actualidad, aunque importa un 20% de la carne que consume en su mercado interno, el saldo en la balanza comercial es positivo.

Uruguay, el país de las cuatro vacas por persona, la ganadería es el principal rubro agropecuario, a diferencia de la Argentina, cuyo principal producto es el grano porque los argentinos consumen cerca del 80% de la producción ganadera mientras que los uruguayos venden al mundo el 70% de su faena.

Si bien, Argentina tiene un mayor número de cabezas de ganado, estimado en los mejores años de su producción reciente en 50 millones, la clave está en el consumo interno y en la relación vaca por habitante. Uruguay con más de 12 millones de vacunos, tiene casi cuatro vacas por habitante, mientras que Argentina tiene poco más de una.

De allí, que a los productores agropecuarios charrúas no les extrañe el auge de las inversiones chinas en su sector. “La carne es a nosotros como el petróleo es a Arabia Saudita” afirman los funcionarios del Instituto Nacional de Carnes de Uruguay.

Estas razones generales sumadas a las características propias de la producción pecuaria, “...en Uruguay la ganadería es el principal rubro agropecuario desde hace 400 años, y su característica es que se realiza mayoritariamente sobre campo natural", explicó la ingeniera agrónoma Laura Bergós, que agregó, “... este es un "recurso valiosísimo porque sólo el 8% del globo está cubierto por pastizales templados productivos y en Uruguay ocupan casi el 50% de su territorio”, fueron fundamentales en el interés del visitante chino.

Pero, fundamentalmente, otra de las razones evaluadas por Jack Ma, que estuvo en el frigorífico Solis Meat, en el departamento de Lavalleja, que cuenta con una importante clientela de origen china para su faena de cerca de 11.000 cabezas realizadas en lo que va de este año y recorrió un campo privado en Maldonado, es la apuesta por la apertura de su economía y la liberalización de las restricciones al negocio agropecuario en Uruguay que le valió liderar en exportaciones y generar divisas para su economía que le significó un crecimiento de las ventas de carne vacuna pero, también, de la hacienda en pie.

Jack Ma está de regreso y sus primeros pasos en los negocios en esta nueva etapa los dio muy cerca de Buenos Aires.