El  área de agua del Qinghai, el lago salado interior más grande de China, ha alcanzado su nivel máximo registrado desde 2004, como resultado del aumento de las lluvias y la mejora de la conservación ecológica.

Ubicado en la provincia de Qinghai, en el noroeste de China, la superficie de agua del lago Qinghai era de más de 4.625 kilómetros cuadrados a fines de septiembre, unos 381 kilómetros cuadrados más que hace 17 años, según el instituto provincial de investigación meteorológica, citando datos de teledetección satelital.

"El aumento de las precipitaciones fue la razón principal de la expansión del área de agua del lago", señaló Zhao Huifang, miembro del personal del instituto. Zhao agregó que la conservación ecológica mejorada también juega un papel importante.

El lago Qinghai es una parte crucial para mantener la seguridad ecológica en la meseta nororiental de Qinghai-Tibet. También es una barrera natural para controlar la propagación de la desertificación hacia el este.

Desde la década de 1950, el agua del lago se iba reduciendo debido a muchas razones, como las actividades humanas. Los efectos combinados de la conservación y los cambios en el clima regional cambiaron la situación. 

En 2008, Qinghai lanzó un plan decenal sobre la protección del medio ambiente ecológico y la gestión integral para la cuenca del lago Qinghai, con una inversión total de 1.570 millones de yuanes (alrededor de 245 millones de dólares).

La mejora del ecosistema del lago ha beneficiado a una variedad de especies de plantas y animales. Por ejemplo, el número de especies de aves en el área había aumentado de 164 a 225 desde 1996 hasta 2020.