El Gobierno de Estados Unidos vuelve a quedar al borde del cierre por falta de financiación
Tras el rechazo del proyecto provisorio por parte del líder republicano Kevin McCarthy, corren riesgo miles de empleos federales.
El presidente republicano de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, rechazó el miércoles un proyecto de ley de financiación provisional que avanza en el Senado, acercando a Washington al cuarto cierre parcial del Gobierno estadounidense en una década en apenas cuatro días.
Eso provocaría el despido de cientos de miles de trabajadores federales y la suspensión de una amplia gama de servicios gubernamentales, desde la publicación de datos económicos a prestaciones nutricionales, hasta que el Congreso apruebe un proyecto de financiación que sea promulgado por el presidente demócrata Joe Biden para convertirse en ley.
El plan del Senado, que avanzó con un amplio margen bipartidista el martes, financiaría el Gobierno hasta el 17 de noviembre, dando a los legisladores más tiempo para acordar los niveles de financiación para el año fiscal completo que comienza el 1 de octubre.
La Cámara de Representantes estaba centrando sus esfuerzos en tratar de acordar más de los 12 proyectos de ley de financiación para todo el año, de los que hasta ahora han aprobado uno.
"No veo el apoyo en la Cámara" para el plan del Senado, dijo McCarthy, aunque el proyecto cuenta con el respaldo de los senadores republicanos, incluido el líder de la minoría, Mitch McConnell.
"El presidente debería intervenir y hacer algo al respecto; de lo contrario, el Gobierno se cerrará", dijo McCarthy a periodistas.
Se espera que la Cámara de Representantes vote a última hora de la noche las enmiendas a los proyectos de ley de financiación específicos, aunque incluso si los cuatro borradores se convirtieran en ley el sábado, por sí solos no serían suficientes para evitar un cierre parcial del Gobierno.
La situación ha empezado a llamar la atención de las agencias de calificación, y tanto Moody's como Fitch han advertido de que podría dañar la solvencia del Gobierno federal.
Por su parte, Biden afirmó que no es inevitable un cierre del gobierno, pero que si se produce, podría verse afectada una gran cantidad de trabajo vital en el ámbito de la ciencia y la salud.
"Si tenemos un cierre del gobierno, muchos trabajos vitales y la ciencia y la salud podrían verse afectados, desde la investigación del cáncer hasta la seguridad alimentaria. Así que el pueblo estadounidense necesita que nuestros amigos republicanos en la Cámara de Representantes hagan su trabajo: Financiar el gobierno", expresó en declaraciones a la prensa en San Francisco.