El gobierno de Japón, a través de la Agencia Tributaria, desarrolló un concurso para que los jóvenes propongan ideas para incentivar el consumo de alcohol. Esta medida se impulsó ya que, luego de la pandemia del Covid-19, la recaudación fiscal de estas bebidas decayó.

Para llevar a cabo este plan realizaron la campaña “Sake Viva!” que consiste en que distintos jóvenes japoneses envíen sus ideas propuestas para incentivar a que se tome más alcohol.

Según indicaron en la página web, el objetivo del gobierno es “revitalizar la industria de las bebidas alcohólicas y solucionar sus problemas”.

LEÉ: Por qué se derrumbó el consumo masivo en la Argentina durante julio, incluyendo bebidas alcohólicas

Los requisitos de los japoneses para participar es tener entre 20 y 39 años y tener ideas que fomenten principalmente el consumo de bebidas como el sake, whisky, cerveza, vino o shochu entre jóvenes. 

Además de que el consumo se viera afectado por la pandemia, el gobierno japonés determinó que la problemática proviene de que la población del país está envejeciendo. A partir de esto, creyeron que la mejor idea de fomentar este consumo es que los propios jóvenes sean quienes averigüen cómo acercar a sus pares hacia la industria. 

Desde la campaña aseguraron que “no buscan que haya consumo excesivo de alcohol y también trabajan para educar a los jóvenes para un consumo moderado”.

LEÉ: Aseguran que consumo moderado de cerveza influye en la diabetes

Para las propuestas está permitido dar ideas que incluyan a la inteligencia artificial o al mundo de las redes sociales, como por ejemplo que influencers publiciten las bebidas en los clubes digitales.

Los jóvenes que quieran enviar sus propuestas tendrán tiempo hasta el 9 de septiembre y el ganador será anunciado por el sitio web oficial de la campaña. La idea elegida será desarrollada por un equipo de profesionales y se comenzará a llevar a cabo a partir de noviembre. 

Según la agencia de impuestos de Japón, en el 2020 las cifras de consumo de alcohol cayeron de 100 litros por persona al año a 75 litros. Además, señalaron que el gasto promedio por persona fue de 9.000 yenes, lo que sería alrededor de 65 euros, siendo menos de la mitad de lo que se había recaudado en 2019.