El príncipe Felipe de Edimburgo, esposo de la reina Isabel II, fue enterrado este sábado en St. George’s Chapel del castillo de Windsor, a unos 50 kilómetros al oeste de Londres, funeral al que asistió un grupo reducido, debido a la pandemia. Fueron sólo 30 personas, en su mayoría del círculo íntimo. 

La ceremonia fue transmitida por televisión a las 16:00 UTC y se realizó un minuto de silencio en su homenaje. A causa de la pandemia, tuvo un carácter especialmente íntimo, a diferencia de como hubiese sido históricamente.  

La reina Isabel encabezó el funeral del duque Felipe de Edimburgo

Militares transportaron su féretro hasta la Capilla en homenaje a los tiempos en que él también estaba en la carrera militar, hasta que se casó con Isabel.

Luego el príncipe Carlos y su hermana Ana, acompañaron el cajón en una corta procesión, completando un viaje por todo el castillo de alrededor de ocho minutos.

En el camino estaban sus hermanos, y detrás William y Harry, sus hijos. Entre ellos estuvo su primo, Peter Phillips. 

Luego prosiguieron los demás miembros de alto rango de la familia real.

El encargado de oficiar el servicio, el arzobispo de Canterbury, Justin Welby, dijo: “Recordamos las distintas maneras que nos ha inspirado, y ha acompañado a la Reina Isabel II. Por su coraje, fuerza y fe. Nuestras vidas han sido enriquecida por sus valores”. Se leyeron pasajes de la biblia para despedir al consorte y sonó William Smith, The Lord’s Prayer y John Day Certain Notes.

Isabel II uso barbijo y se sentó sola, mientras que todos los participantes de la ceremonia siguieron las pautas sanitarias y permanecieron socialmente distanciados entre ellos.

La reina Isabel encabezó el funeral del duque Felipe de Edimburgo
JONATHAN BRADY / POOL GETTY