El ejército de Israel anunció este jueves que comenzó una serie de ataques contra objetivos de Hezbollah en el sur de Líbano.

Mientras tanto, el líder de ese grupo armado, Hassan Nasrallah, aseguró este jueves en un discurso televisado que las mortales explosiones de dispositivos en todo Líbano el martes y el miércoles, que mataron a por lo menos 37 personas, constituyen "un acto de guerra y una declaración de guerra por parte de Israel".

Israel "violó todas las líneas rojas", indicó Nasrallah, y calificó a los incidentes como "masacres".

"Estos ataques en Líbano siguen siendo investigados, incluidos los dispositivos utilizados", agregó, según informaciones de la agencia de noticias Xinhua.  

Durante ese discurso, los aviones israelíes rompieron enormes barreras de sonido sobre Beirut.