Más de 42.000 contagiados en una semana hicieron rever al gobierno de Boris Johnson la decisión de liberar con la llegada del verano boreal las restricciones que aún permanecían vigentes, como el cierre de los entretenimientos nocturnos, y postergarlas por un mes más.

De esta forma, la fecha prevista para esta última fase del plan de reapertura se retrasa hasta el 19 de julio, aunque con la opción abierta de revisar la situación ante la posibilidad de levantar las restricciones el 5 de julio, aunque se consideró algo "poco probable".

Antes del anuncio del primer ministro, el titular de Salud británico, Matt Hancock, ya había anticipado a principios de mes que el Gobierno contemplaba abiertamente la posibilidad de aplazar la fecha de reapertura, lo cual desató una ola de críticas que dilataron la medida.

Pero el registro de 7.742 casos positivos de coronavirus este domingo y que se sumaran 8 nuevas muertes, según datos comunicados del Ministerio de Salud, definieron la prolongación del parcial resguardo sanitario.

Asimismo, las autoridades de salud creen que esta variante Delta es un 60% más transmisible que la dominante anterior y los expertos afirman que puede provocar una tercera ola de infecciones en el país, uno de los más golpeados en la primera ola.

"Creo que lo más sensato es esperar un poco más", dijo este lunes Boris Johnson. "Confío en que no sean más de estas cuatro semanas", agregó, esperanzado en que en este tiempo se podrá ampliar aún más la vacunación, que avanza a gran ritmo en Reino Unido.

La característica de este rebrote es que el 90% de los casos detectados obedecieron a la denominada variante Delta, originada en la India, cuya propagación es mayor que la Alpha, surgida por primera vez en Kent, y se la ha comprobado más resistente a la inmunización cuando las vacunas fueron aplicadas en una sola dosis.

Otra particularidad es que presentan un mayor riesgo de hospitalización. Hace algunos días, se había recalentado una polémica a nivel científico tras un informe de la organización Public Health (PHE), la cual reveló, además, que los casos se duplican entre cada 4 días y medio y 11 días y medio, según las regiones, y que el riesgo aproximado de transmisión en el hogar es un 60% mayor que con la variante india.

En una entrevista en el programa Time Radio, Chris Hopson, director ejecutivo de NHS Providers, advirtió que la demografía de edad ha cambiado desde el inicio del programa de vacunación y que los hospitales ahora están viendo que se admiten grupos más jóvenes en lugar de sus contrapartes mayores durante el pico de la pandemia a principios de este año, atribuyendo este cambio a la campaña de vacunación del país.

“Lo que los directores ejecutivos nos dicen constantemente es que está llegando una población mucho más joven, son menos vulnerables clínicamente, tienen menos necesidad de cuidados críticos y, por lo tanto, están viendo lo que creen que es una tasa de mortalidad significativamente más baja que es confirmada por las cifras”, señaló Hopson.

Los contagios mandan

Los casos confirmados saltaron la semana anterior de 29.892 a 42.323 y el saldo total de la pandemia hasta ahora es que hubo 127.904 fallecidos y 4,5 millones de contagios.

La resistencia social a este estiramiento de las limitaciones responde al largo período de confinamiento que le tocó afrontar a la sociedad, aun con las flexibilizaciones graduales que se dispusieron.

En las regiones de Escocia, Gales e Irlanda del Norte el ritmo de aflojamiento fue mayor que el de Londres.

Las reacciones no se hicieron esperar y una de las primeras en conocerse fue la pronunciada por la Asociación de Industrias Nocturnas, al advertir que el nuevo retraso será catastrófico para sectores como los clubes nocturnos, que desde marzo se encuentran cerrados, y habían previsto un relanzamiento para la semana que viene que le devolviera volumen de clientela.

Actualmente, el límite de invitados a bodas y otros eventos es de 30 personas.

En España este retroceso fue mal recibido, porque contaban con el turismo británico para entonar la temporada, y para ello el gobierno de Pedro Sánchez le había levantado las barreras hace algunos días.

Sin embargo, la variante india despertó preocupación mundial, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Informó este lunes conclusiones de los estudios preliminares que muestran que la mutación B.1.617 -que ya se ha extendido a más de 30 países- se propaga más fácilmente que otras variantes y requiere más investigación.

Otras tres versiones -las de Reino Unido, Sudáfrica y Brasil- recibieron la misma designación.