Algunas pruebas apuntan a que la explosión mortal de este mes en un concurrido mercado de la ciudad de Kostantínovka, en el este de  Ucrania, fue causada por un misil errante disparado por las fuerzas que responden a Kiev, informó este martes el New York Times.

Ucrania afirmó que la explosión del 6 de septiembre, en la que murieron al menos 16 personas, fue causada por un misil ruso e incluso el presidente Volodímir Zelenski se apresuró a condenar el hecho, en que murió un niño, mientras que visitaba el país el secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken.

"Las pruebas recopiladas y analizadas por The New York Times, incluidos fragmentos de misiles, imágenes por satélite, relatos de testigos y mensajes en las redes sociales, sugieren claramente que el catastrófico ataque fue el resultado de un misil de defensa antiaérea  ucraniano errante disparado por un sistema de lanzamiento Buk", informó el periódico.

El periódico citaba a expertos en defensa antiaérea que afirmaban que misiles como el que impactó en Kostantínovka pueden desviarse de su trayectoria por diversas razones, como un fallo electrónico o tener una aleta de guiado dañada o cortada durante el lanzamiento.

Lo probaron las cámaras de seguridad 

Las imágenes de las cámaras de seguridad muestran que el misil cayó en Kostantínovka desde territorio ucraniano y no desde detrás de las líneas rusas.

El New York Times también citaba pruebas que demostraban que minutos antes del ataque, el ejército ucraniano había lanzado dos misiles tierra-aire hacia la línea del frente ruso desde la ciudad de Druzhkivka, 16 kilómetros al noroeste de Kostantínovka.

El periódico citó a dos testigos que dijeron haber visto los misiles disparados desde Druzhkivka en dirección a la línea del frente ruso alrededor de la hora del ataque. Según uno de ellos, los misiles se dirigieron hacia Kostantínovka. 

Según el medio neoyorquino, las mediciones de los agujeros causados por la explosión y los fragmentos hallados en el lugar de los hechos coincidían con el misil 9M38, disparado por el vehículo antiaéreo móvil Buk, un sistema que utilizan ambos bandos.