Un nuevo arsenal equipado con misiles balísticos intercontinentales, uno de los cuales podría convertirse en el de mayor envergadura jamás expuesto por la nación asiática, desfiló el último fin de semana por las calles de Pyongyang.

Con motivo de celebrarse un nuevo aniversario de la fundación del gobernante Partido de los Trabajadores, el armamento fue exhibido por primera vez en dos años.

Corea del Norte reveló misiles balísticos intercontinentales que nunca había mostrado.

La novedad es el Hwasong-15, el misil de mayor alcance jamás probado por el país.

Para algunos expertos, el Hwasong-15, que se mostró en un vehículo transportador con 11 ejes, sería uno de los misiles balísticos intercontinentales móviles por carretera más grandes del mundo.

"Este misil es un monstruo", dijo Melissa Hanham, subdirectora de Open Nuclear Network.

Para Markus Garlauskas, ex oficial de inteligencia de Estados Unido, la exhibición del nuevo arsenal estaría indicando que Pyongyang estaría disipando dudas sobre la capacidad de Corea del Norte de atacar el territorio continental, así como que podría estar preparando pruebas con el Hwasong-15.

"Si el Hwasong-15 pudiera llevar una ojiva nuclear 'supergrande' a cualquier lugar de Estados Unidos, entonces la pregunta natural es ¿qué puede llevar este misil más grande?", cuestionó Garlauskas.

Previo a la fecha, funcionarios del Gobierno estadounidense y del de Corea del Sur ya habían anticipado que el mandatario norcoreano, Kim Jong-un, podría aprovechar el evento para hacer una nueva demostración de armamento en un momento en que los diálogos sobre desnuclearización con la Administración Trump se encuentran estancados.

Es la primera vez que Pyongyang exhibe misiles balísticos desde que el líder inició una serie de negociaciones con mandatarios internacionales, entre los cuales figura el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, con quien inició negociaciones en 2018.

Durante su discurso, que inició marcadas las 00:00 (hora local, el sábado último), Kim se dirigió a los presentes vestido con un traje gris y rodeado por una comitiva militar.

El mandatario habló ante una gran multitud, aunque no hizo ninguna mención directa a Estados Unidos ni a las ahora estancadas conversaciones de desnuclearización.

Kim se refirió, entre otros asuntos, a la difícil situación económica de la nación, de la que culpó a las sanciones internacionales, a las tormentas tropicales y al coronavirus.

"Me avergüenza no haber podido recompensarlos debidamente por su enorme confianza", dijo el mandatario, quien se declaró decepcionado de que el país no haya alcanzado sus metas de progreso.

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Corea del Norte mostró su nuevo arsenal en un desfile

Foto: Archivo AFP Peyongeang Press Corps NA.