Los países europeos se vieron sumidos en el caos después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, anunciara que aquellos "países hostiles" que compran el gas de Rusia ahora tendrán que pagar en rublos.

"Rusia continuará, por supuesto, suministrando gas natural de acuerdo con los volúmenes y los precios. Los cambios solo afectarán la moneda de pago, que se cambiará a rublos rusos", sostuvo Putin este miércoles en una reunión televisada con los principales ministros del Gobierno. Los países de Europa compran alrededor del 40% de su consumo total de gas a Rusia.

Desde que la Unión Europea (UE) anunció sanciones a Rusia en respuesta a su operación militar especial contra Ucrania en febrero, el comercio de gas entre las dos partes ha sido el centro de atención con el fluctuante volumen comercial diario.

La Comisión Europea no ha hecho comentarios sobre la última medida rusa, pero el ministro federal de Asuntos Económicos y Acción Climática de Alemania, Robert Habeck, expresó que discutiría con socios europeos una posible respuesta a Moscú. El primer ministro holandés, Mark Rutte, afirmó que precisan de más tiempo para clarificar la demanda de Rusia. También se han planteado dudas sobre si la medida rusa violará normas comerciales.

Los países que han impuesto sanciones a Rusia-Estados Unidos, los estados miembros de la UE, Reino Unido, Japón, Canadá, Noruega y Singapur, han sido calificados como "hostiles".