Con medidas especiales por la pandemia, que incluirán el voto habilitado desde hospitales y domicilios y la extensión en dos días de la jornada electoral, Italia decidirá este domingo y el lunes si confirma la ley que rebaja de 945 a 600 la cantidad de legisladores y elegirá autoridades en siete de las 21 regiones y provincias autónomas, en unas elecciones que pueden reforzar al Gobierno de Giuseppe Conte pese al crecimiento de la oposición en algunas zonas del país.

Son 51.559.898 las personas habilitadas a votar entre domingo y lunes para decidir en referéndum si se mantiene o no la ley que impulsa el oficialismo y que rebaja de 630 a 400 los Diputados y de 315 a 200 los Senadores.

Por otro lado, 18.590.081 personas de las regiones de Véneto, Campaña, Toscana, Las Marcas, Liguria, Apuplia y Valle de Aosta elegirán autoridades en una jornada electoral en la que, para asegurar el distanciamiento social, se hará el domingo de 7 a 23 y el lunes de 7 a 15 (5 horas menos en Argentina).

De cara a la elección, el Gobierno dispuso que las estructuras sanitarias con entre 100 y 199 pacientes puedan armar circuitos electorales especiales.

Además, se permitirá el voto desde el domicilio, que será recogido por un equipo especial, para quienes estén cumpliendo cuarentena por el coronavirus y hayan comunicado a las autoridades locales su intención de sufragar.

A nivel nacional se votará en referéndum si se ratifica o no la ley aprobada en octubre de 2019 tras una fuerte insistencia del Movimiento Cinco Estrellas (M5E), uno de los principales partidos de la coalición que sostiene a Conte, que prevé que se reduzcan 345 legisladores entre las dos Cámaras

"Votaré a favor del recorte de parlamentarios porque si se pasa de 945 a 600 legisladores no será perjudicada en absoluto la funcionalidad del Parlamento", explicó Conte en las últimas horas al sostener en declaraciones televisivas la campaña del oficialismo.

El Cinco Estrellas, con el canciller Luigi Di Maio a la cabeza, insiste hace años con la necesidad de aprobar la ley por lo que denominan una batalla más en su guerra contra la "casta" de la política, y argumentan que habrá un ahorro de al menos 100 millones de euros al año con la nueva composición de las Cámaras.

La otra fuerza central del Ejecutivo, el Partido Democrático (PD), recién consolidó a inicios de septiembre su apoyo orgánico al Sí y pidió que sea "un punto de partida de un proceso de reformas", y desestimó el impacto real del ahorro que argumentan sus socios en el Ejecutivo.

Desde la oposición, las derechistas Liga de Matteo Salvini y Hermanos de Italia de Giorgia Meloni adelantaron ya su apoyo al Sí, y plantearon que la confirmación de la ley no debería traducirse en un éxito de Conte.

La otra fuerza central de la oposición, la Fuerza Italia de Silvio Berlusconi, recién manifestó su rechazo a la norma este viernes, por considerar que dará "menos espacios de democracia".

Con la nueva ley, la representación de Diputados pasará de uno cada 96.006 habitantes a uno cada 151.210 habitantes, mientras que en el Senado habrá un legislador cada 302.420 habitantes, en vez de uno cada 188.424 habitantes como hasta ahora.

En caso de victoria del Sí, sin embargo, los cambios concretos recién podrían verse en marzo de 2023, cuando se da la finalización natural de la actual Legislatura elegida en marzo de 2018; o si se da una finalización anticipada para convocar a nuevas elecciones.

En ambos casos, debería redactarse antes una nueva ley electoral para adecuar la composición reducida del Parlamento a los colegios electorales.