Human Rights Watch aseguró que China está llevando a cabo "el ataque más intenso contra los derechos humanos jamás realizado".

La declaración fue realizada por el titular de la ONG, Kenneth Roth, en el marco de la presentación de su Informe Mundial 2020.

Allí se describe la manera en que el Gobierno del país asiático ejecuta sus "políticas represivas" dentro de sus fronteras y como usa el control absoluto que tiene sobre la economía para resguardarse de consecuencias en el plano internacional.

Entre los ejemplos más visibles se encuentran la represión a las protestas pro-democracia en Hong Kong; la restricción a las libertades en el Tíbet o a la libertad de expresión en el país y su extensión en el plano internacional.