El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, animó a los ciudadanos a vacunarse masivamente a partir del primero de mayo con el objetivo de recuperar la cotidianidad para verano

El mandatario quiere acelerar el proceso de vacunación de su país para que se vacunen los ciudadanos, independientemente de su edad o condición sanitaria. 

Su objetivo declarado es llegar lo antes posible a la inmunización colectiva y la fecha elegida es el 4 de julio, Día de la Independencia.

En un discurso televisado en horario de máxima audiencia, el mandatario se dirigió a la nación con motivo del primer aniversario de la declaración de la pandemia con el objetivo de concienciar de la importancia de la vacunación frente al virus.

Hasta el momento, esta enfermedad ha hecho que más de 530.000 estadounidenses hayan fallecido y más de 29,2 millones se hayan contagiado, según los datos que brinda el sitio France24.com

“Estamos Unidos por la pérdida y el dolor de los días que han pasado. También estamos unidos por la esperanza y las posibilidades en los días que tenemos por delante", replicó.

La elección del 4 de julio como fecha para el regreso de una posible normalidad tiene un marcado carácter patriótico para los estadounidenses y apela a la unidad que el presidente lleva buscado desde su entrada a la Casa Blanca el pasado 20 de enero.

Esta festividad es clave en el calendario local y un supuesto levantamiento de restricciones podría permitir que millones de personas se reúnan a celebrar en familia, como tradicionalmente ocurre.

Para lograrlo el objetivo que se impuso, Biden anunció el despliegue de 4.000 soldados más en todo el territorio para acelerar la vacunación y la distribución de dosis a centros de salud locales y a farmacias de barrio.

A esto añadió que planean lanzar un sitio web para indicar a los ciudadanos donde pueden encontrar las dosis de forma cercana.

Pero Biden advirtió que hasta que ese día llegue, se tienen que seguir respetando las normas de forma estricta.

El mandatario advirtió que el uso de mascarilla y el distanciamiento social deben de seguir adelante hasta que mejore la situación.

“Este no es el momento de no ceñirse a las reglas", constató el presidente demócrata.

Desde su campaña electoral, Joe Biden ha promulgado un discurso de advertencia frente a la gravedad del virus y de defensa de las vacunas para terminar con él.

Algo que ha contrastado fuertemente con lo promulgado por su antecesor, el republicano Donald Trump, que se mostró crítico con algunas medidas de contención del virus y ambiguo respecto a su gravedad.

Según una encuesta de medios de comunicación locales lanzada este jueves, el 30 % de los estadounidenses no planean vacunarse, un grupo que incluye al 47 % de quienes votaron por Trump en las elecciones de noviembre.

 Biden volvió a asegurar en su discurso que las vacunas son seguras y muestra de ello es que él mismo se inoculó las dosis en público y que los datos que arrojan las personas ya inmunizadas son “extraordinariamente buenos”.

"Necesito su ayuda. Necesito que se vacunen cuando sea su turno", subrayó.

Biden se mostró muy critico con la gestión que realizó la administración Trump de la pandemia y a su llegada prometió inocular 100 millones de dosis en los primeros 100 días de Gobierno, un reto importante para comenzar un mandato marcado por la pandemia.

Hasta el momento, han recibido al menos una dosis 62 millones de personas y están totalmente inmunizadas con doble dosis 32 millones.

Datos muy esperanzadores que esperan materializarse lo antes posible en una inmunidad rebaño, concluye el sitio francés.