El jefe del ejército privado ruso Wagner, Yevgeny Prigozhin, afirmó este martes que sus fuerzas controlaban más del 80% de la devastada ciudad de Bakhmut, en el este de Ucrania, después de algunos de los combates más duros y sangrientos de la guerra.

Altos funcionarios militares ucranianos no abordaron los reclamos directamente, pero dijeron que sus fuerzas se mantuvieron firmes contra feroces ataques en lo que alguna vez fue una ciudad de 70.000 habitantes. 

Los combatientes de Wagner lideraron los esfuerzos de meses de Rusia para capturar a Bakhmut, donde la guerra de trincheras y los constantes bombardeos de artillería motivaron la comparación con la Primera Guerra Mundial debido a las enormes bajas infligidas en ambos bandos.

Qué dice Yevgeny Prigozhin

El líder de Wagner, Yevgeny Prigozhin, aseguró que sus fuerzas, que han desempeñado un papel importante en los avances rusos en el este, estaban presionando con su cerco de Bakhmut.

"En Bakhmut, la mayor parte, más del 80% está ahora bajo nuestro control, incluido todo el centro administrativo, fábricas, almacenes, la administración de la ciudad", expresó en un video publicado por un bloguero militar ruso.

Qué dice el funcionario ruso instalado en Donetsk

El jefe de la región de Donetsk instalado por Rusia, una de las cuatro áreas declaradas anexadas por Moscú en septiembre pasado, aseveró que las fuerzas rusas habían arrinconado a los defensores ucranianos.

"En las áreas occidentales donde sus unidades están atrincheradas, no tienen otra opción que dar un paso al frente y entregarse", citaron las agencias de noticias rusas a Denis Pushilin a la televisión estatal.

Serhiy Cherevatyi, portavoz del Comando Militar Oriental de Ucrania, aseguró que la situación en Bakhmut estaba bajo control y agregó que Kiev no permitiría que sus tropas fueran rodeadas.

La posición de Ucrania al respecto

La viceministra de Defensa de Ucrania, Hanna Malyar, reconoció que Bakhmut "recibió el golpe principal" en los combates pero indicó que las fuerzas rusas, dijo, "generalmente están perdiendo en las batallas callejeras, por lo que simplemente están destruyendo todos los edificios y estructuras".

Kiev pidió más y mejores armas occidentales para vencer a Rusia; altos funcionarios ucranianos siguieron adelante con su intento de persuadir a los aliados para que abran las reservas, completó un informe de la agencia de noticias Reuters.