Atacaron a tropas estadounidenses estacionadas en Irak
Las hostilidades recrudecieron los últimos días
Las tropas estadounidenses fueron atacadas repetidamente en Irak y Siria en los últimos días, informaron funcionarios estadounidenses.
El presidente Joe Biden envió poder naval a Oriente Medio en las últimas dos semanas, incluidos dos portaaviones, otros buques de guerra y unos 2.000 marines.
Los ataques contra las fuerzas estadounidenses aumentaron desde que estalló el conflicto en Israel el 7 de octubre cuando militantes palestinos de Hamas atacaron el sur de Israel.
El miércoles, un dron atacó a las fuerzas estadounidenses en Siria, provocando heridos leves, mientras que otro fue derribado.
Durante una falsa alarma en la base aérea de Al-Asad en Irak, un contratista civil murió de un paro cardíaco, informó la agencia de noticias Reuters.
A principios de esta semana, las fuerzas estadounidenses frustraron varios drones que apuntaban a tropas en Irak.
El jueves, drones y cohetes apuntaron a la base aérea de Ain al-Asad, que alberga fuerzas estadounidenses y otras fuerzas internacionales en el oeste de Irak, y se escucharon múltiples explosiones dentro de la base.
Los cohetes alcanzaron otra base militar que alberga a fuerzas estadounidenses cerca del aeropuerto internacional de Bagdad, informó la policía iraquí, sin proporcionar más detalles.
"Aunque no voy a pronosticar ninguna respuesta potencial a estos ataques, sí diré que tomaremos todas las medidas necesarias para defender a las fuerzas estadounidenses y de la coalición contra cualquier amenaza", declaró a los periodistas el portavoz del Pentágono, el general de brigada Patrick Ryder.
Ryder aclaró que no veía un vínculo entre el aumento de los ataques y el conflicto entre Israel y Hamás.
Estados Unidos tiene 2.500 soldados en Irak y 900 más en la vecina Siria, con la misión de asesorar y ayudar a las fuerzas locales en la lucha contra el Estado Islámico, que en 2014 se apoderó de franjas de territorio en ambos países.
En Irak, la tensión por la guerra en Gaza ya había sido alta. Su principal clérigo musulmán chiíta, el gran ayatolá Ali al-Sistani, condenó la semana pasada a Israel y llamó al mundo a enfrentar la "terrible brutalidad" en la sitiada Gaza.
Kataib Hezbollah, una poderosa facción armada con estrechos vínculos con Irán, acusó a los Estados Unidos de apoyar a Israel en "matar gente inocente" y aseguró que debería abandonar Irak.
En los últimos años, las milicias respaldadas por Irán en Irak atacaron regularmente con cohetes a las fuerzas estadounidenses en Irak y a la embajada de Estados Unidos en Bagdad.
El ejército iraquí informó que cerró el área alrededor de la base y comenzó una operación de búsqueda.