Una manifestación contra el suministro de armas a Ucrania para la guerra con Rusia congregó el sábado a 10.000 personas, provocando las críticas de altos cargos del gobierno alemán y una gran presencia policial para mantener el orden.

Organizada por una destacada política alemana de izquierda, la protesta se produce un día después del primer aniversario de la invasión rusa de Ucrania, que suscitó promesas de más armas por parte de los aliados occidentales, nuevas sanciones contra Rusia y muestras de apoyo a Kiev en todo el mundo.

"Pedimos al canciller alemana que detenga la escalada de entregas de armas. Porque cada día perdido cuesta hasta 1.000 vidas más y nos acerca a una tercera guerra mundial", afirmaron los organizadores de la protesta en su página web.

El "Levantamiento por la Paz" fue organizado en parte por Sahra Wagenknecht, miembro del partido de izquierda alemán Die Linke.

LEÉ: La Unión Europea remarcó que aplicará sanciones a Rusia "hasta que Ucrania sea liberada"

Alemania, junto con Estados Unidos, ha sido uno de los mayores proveedores de armas a Ucrania.

"Negociar, no escalar", decía una pancarta sostenida por un manifestante, mientras que en una pancarta entre la multitud se leía "No es nuestra guerra".

Un portavoz de la policía dijo que 10.000 personas se congregaron en torno a la simbólica Puerta de Brandemburgo, en el centro de Berlín.

La policía movilizó a 1.400 agentes para mantener el orden y hacer cumplir las prohibiciones de uniformes militares, banderas rusas y soviéticas, canciones militares rusas y símbolos de extrema derecha.

El portavoz de la policía dijo que no había señales de asistencia de grupos de extrema derecha y que la protesta, a la que el ministro alemán de Finanzas, Christian Lindner, dijo que había que "oponerse claramente", era pacífica.

"Quien no esté al lado de Ucrania está en el lado equivocado de la historia", dijo Lindner en Twitter.

Fuente: Reuters