Los devastadores incendios forestales que azotan Australia no dan tregua y los daños son cada vez mayores para la población y la naturaleza de aquel país, por lo que el Gobierno ya declaró en estado de emergencia a varias zonas afectadas por el fuego.

Un equipo de la Universidad de Sidney informó que ya fueron arrasadas 5,25 millones de hectáreas de vegetación y casi 500 millones de animales murieron como consecuencia del siniestro, que ya se cobró la vida de al menos 19 personas.

El número de viviendas destruidas hasta el momento es de 1.365, sólo en Nueva Gales del Sur, y otras 449 esta semana en la costa sur.

Entre las especies de animales que sufren los efectos de los incendios se encuentran varias que están en peligro de extinción, como canguros, wombats, demonios de Tasmania y koalas.