La Bolsa de Comercio de Rosario elaboró un análisis del panorama para el agro argentino durante 2022, en el que presentó cinco claves que determinarán el resultado para los productores: clima, insumos, precios, el FMI y la política agropecuaria.

  • Clave 1 - Perspectivas climáticas para el otoño 2022

A poco de comenzar la campaña fina, las miradas están puestas en lo que sucederá con el clima. Después de dos años consecutivos de acción del fenómeno "La Niña", con lluvias por debajo de los promedios normales, se potenció la caída de reservas de agua en la mayor parte de la región central. Esta campaña 2021/22 la BCR estima que se obtendrá la producción más baja de soja de los últimos catorce años en la Región Núcleo.

“La NOAA (Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica del Departamento de Comercio de los Estados Unidos) emitió un nuevo índice ONI, el cual tiene un valor de -1, esto quiere decir que se mantiene el enfriamiento del Pacífico Ecuatorial, por lo cual continuará el fenómeno La Niña durante los próximos meses”, anticiparon desde la entidad.

De acuerdo a sus estimaciones, hay una probabilidad del 77% de contar con este evento hasta marzo-mayo de 2022 y una transición a la neutralidad, con un 56% de probabilidad, durante mayo-julio 2022. “La extensión de este fenómeno será clave, ya que la superficie de trigo estará condicionada por las reservas de agua a la siembra”, indicaron.

  • Clave 2 - Márgenes y relación insumo producto

En los últimos días se sigue registrando una gran volatilidad en los precios de soja, maíz y trigo. De acuerdo con la proyección realizada para la campaña 2022-2023 por la BCR, considerando los precios actualizados al viernes 4 de marzo, el maíz temprano continúa liderando la tabla de márgenes con 790 USD/ha en campo propio. El doble cultivo trigo/soja queda en segundo lugar con 714 USD/ha, mientras que la soja temprana en campo alquilado queda en última posición con un margen neto de 50 USD/ha. Sin embargo, “los asesores coinciden en que la variable definitoria es el agua a la siembra, más allá de los precios de los insumos o del cereal, todo dependerá como se sucedan las precipitaciones de aquí a mayo”, aseguraron desde la BCR.

  • Clave 3: Tiempos turbulentos en los mercados de materias primas

“A un mercado que ya venía convulsionado por las tensiones en las cadenas de suministro postpandemia y el impacto de la sequía en Sudamérica, se suma el conflicto bélico en la región del Mar Negro, proveedor clave de energía, fertilizantes y commodities agrícolas al mundo”, señalaron desde la BCR. En tanto que agregaron que eso condujo a que “los precios de referencia en el mercado externo han mostrado un fuerte impulso alcista, aunque con una diferencia: la suba real descontando la tasa de inflación en EE. UU. no es tan pronunciada como el incremento nominal en las cotizaciones”.

“Rusia y Ucrania, involucrados hoy en un conflicto bélico que genera gran temor por las repercusiones humanitarias y sociales primero, y económicas después, constituyen una región clave en el abastecimiento de materias primas a una gran variedad de regiones del mundo”, detallaron desde la entidad rosarina.

En ese sentido, mencionaron que por ejemplo “en trigo, particularmente, Rusia ocupa el segundo lugar entre los principales exportadores mundiales sólo por detrás de la Unión Europea considerada como bloque, con el 17%, en tanto que para maíz Ucrania se convertiría este año en el tercer principal abastecedor global, sólo por detrás de Estados Unidos y Argentina, representando también el 17% del mercado mundial”.

Argentina ya pactó la entrega de 41 millones de toneladas de trigo, maíz, poroto, harina y aceite de soja al exterior de la campaña comercial 2021/22, el segundo volumen más alto de su historia, sólo por detrás de la campaña 2019/20.

“Mirando hacia el futuro, queda claro que hoy el mercado está pagando una prima por incertidumbre, y es difícil saber hasta cuándo se mantendrá esta situación. En general, son cuatro los factores principales que hoy mira el mercado: la geopolítica mundial, la inflación global y la reacción que tomen las economías centrales frente a ello que puede afectar la tasa de interés, el comienzo de las siembras de la campaña gruesa en EE. UU. y la política comercial doméstica”, expresaron desde la institución rosarina.

  • Clave 4 – El impacto del acuerdo con el FMI para el sector agropecuario

Con respecto al entendimiento alcanzado con el Fondo Monetario Internacional (FMI), desde la BCR analizaron que “el acuerdo alcanzado por el país con el FMI pretende alcanzar un sendero de sostenibilidad de la deuda y presenta como condición necesaria un reequilibrio de las cuentas públicas”.

Continuando ese razonamiento, explicaron que “el gobierno propone mantener la recuperación económica y social en curso y, al mismo tiempo, abordar los desafíos en materia de finanzas públicas, fortalecimiento de la balanza de pagos, reducción de la inflación y mejorar la resiliencia del crecimiento”.

Asimismo señalaron que “dada la gran relevancia que presenta el sector agroindustrial en la economía local, las definiciones que se alcancen claramente tendrán un impacto importante a nivel sectorial delimitando la política agropecuaria”.

  • Clave 5 – Política agropecuaria y desafíos para el campo y la agroindustria argentina

Respecto de los principales desafíos de la política doméstica que afectan al agro, la BCR expresó que no aprueba las propuestas impulsadas por el gobierno nacional en materia de constitución de fideicomisos de productos agroindustriales por considerar que “no brindan una solución efectiva a la inflación, interfieren en el normal funcionamiento de los mercados y se traducen en un costo adicional para la producción, ya afectada por una situación hídrica extrema”.

Por eso, sostienen que "sus efectos a mediano y largo plazo resultan negativos para la producción, la exportación y la generación de divisas”, agregaron. También desde la institución insistieron sobre la necesidad de “asegurar la importación de fertilizantes a tiempo, garantizando el acceso de las empresas al MULC a tal efecto”.

Desde la entidad también reiteraron su apoyo a la reducción de Derechos de Exportación, simplificación tributaria y disminución de la presión impositiva como medio para impulsar la producción, el empleo, la industrialización y las exportaciones de la economía argentina.