Ricardo Mollo y sus inicios en la música, el recuerdo de Luca Prodan y los artistas de la nueva generación
Andrea Rincón entrevistó al líder de Divididos para el programa "Quién paga la fiesta", de Rock & Pop.
Andrea Rincón fue hasta la quinta que Ricardo Mollo tiene en Parque Leloir para entrevistarlo para el programa "Quién paga la fiesta", de Rock & Pop. Antes de presentar la entrevista, la panelista le dijo al conductor del programa, Martín Ciccioli, que trataron muy bien a todo el equipo del programa y que quedó muy contenta con la extensa entrevista que le realizó al líder de Divididos.
"Estoy contenta y nerviosa porque soy tu fan", admitió Andrea Rincón al saludar a Ricardo Mollo en el estudio de grabación donde creó su último álbum "Haciendo cosas raras".
Su primera pregunta fue sobre Luca Prodan, el líder de Sumo, a quién encontró muerto un 22 de diciembre de 1987, en pleno furor del público por la banda.
A Luca lo consideró "un maestro" porque "es alguien que sin querer vino a enseñar cosas que no son musicales pero que filosóficamente tienen que ver con la música. No queríamos que muera, pero sabíamos que iba a pasar. En un momento empezó a sufrir un deterioro más precipitado, su hígado funcionaba mal y el deterioro fue tan rápido que en un momento se precipitó, eso nos dejó a todos como huérfanos, nos sentimos desamparados".
Mollo recordó que convocaron al hermano de Luca para tratar de volver con la banda: "A mí no me parecía sano seguir llamándonos Sumo, así que ahí llegó Divididos".
Luego el artista se refirió al éxito que vienen cosechando desde 1988 con Divididos y la vigencia que mantienen con su público que ya atraviesa a tres generaciones. "Al principio, nosotros no supimos entender lo que es un hit. El exceso de exposición te saca de ese mundo propio y las canciones no te pertenecen".
Si bien no sigue a muchos de los nuevos artistas que surgieron en los últimos años, elogió a Wos, a quien eligió para la colaboración del tema "Culpa": "Me parece un chico muy valioso, que tiene muchas cosas para decir. Más allá del volumen de cosas, muchas decantan con el tiempo y él va a quedar ahí. Él supo toda esa modernidad y el sonido del autotune que no lo necesita porque el pibe tiene resto. Le siento como algo que tiene peso... Debe haber un montón que están haciendo cosas buenas, pero no los conozco a todos".
Mollo además recordó el momento viral que vivió hace pocos días cuando se emocionó al ver a un niño cantando con mucho entusiasmo su tema "Spaghetti del Rock", durante su show en el Estadio Obras: "El otro día me emocionó ver a un pibito cantando tan emocionado, pero el punto más fuerte fue cuando la época pandémica nos llevó a los teatros y ahí ves las diferentes generaciones, es muy gratificante".