Pepe Cibrián comunicó este miércoles su decisión de renunciar a “Cantando 2020”, a raíz de un caso de Covid-19 cercano a su familia y su responsabilidad al estar al cuidado de su tía de 90 años. Sin embargo, Jorge Rial expuso una versión diferente sobre la salida del conductor teatral. “Lo limpiaron, lo dinamitaron, se lo sacaron de encima, lo rajaron”, manifestó el conductor de “Intrusos”. Y explicó: “Le pedían sangre, que peleara a los participantes, él pidió que le dieran dos semanas más para que pudiera acomodarse”.

Por su parte, Rodrigo Lussich agregó: “Pepito se fue llorando”. Y aseguró que el artista se angustió a causa de las presiones que recibía para que fuera más severo a la hora de cantar. “No es fácil bancar a la producción de Tinelli cuando se ponen insistentes con un tema. Durante dos semanas lo limaron a presión para que pelee a los participantes. Sin resultado, Pepe un poco se adelanta con una renuncia, pero fue un claro despido”, expuso el periodista y explicó que desde LaFlia buscaban que Cibrián tuviera un perfil combativo, parecido al de Marcelo Polino en el “Bailando”.

En tanto, Adrián Pallares apoyó la teoría del despido de Pepe. “En un principio le dijeron: ‘vamos viendo, quizás podés poner venir una vez por semana’. Y barajaron la idea de tener un jurado rotativo”, contó. Y Guido Záforra expuso una conversación que mantuvo con Cibrián, en la que el director le confirmó sus problemas familiares y su preocupación por la salud de su tía, pero remarcó que, en un principio, tenía la idea de tomarse dos días libre: martes y miércoles.