Nicolás Cabré habló de su cambio de actitud hacia la prensa: "El único límite que pongo es mi hija"
El actor, que cosechó fama de "mala onda", reveló que en los últimos años se propuso adoptar una nueva conducta.
Nicolás Cabré inició su carrera como actor a los 10 años, motivo por el que pasó la mayor parte de su vida siendo una figura de los medios, con todas las ventajas y desventajas que eso representa. Nunca le resultó difícil lidiar con la exposición y en su juventud ha tenido varios cruces con periodistas. Sin embargo, de un tiempo a esta parte adoptó una nueva postura y se muestra mucho más relajado.
"¿Estuviste cerca de boxear a un notero o un fotógrafo alguna vez?", le preguntó Jey Mammon en Los Mammones. Y el actor aprovechó la pregunta para explicar por qué decidió cambiar de actitud. "No llegue a tener ganas boxear, sí he tenido mis dichos. Ahora lo entiendo de otra manera, hoy por hoy el único límite que pongo es mi hija. Si estoy con Rufi, evítenme, pero después sé que hay cosas que van a preguntar, que se van a decir, las entiendo, y he intentado modificar algunas cosas: no creo que la culpa sea toda de ellos", planteó en referencia a Rufina, la hija que tuvo con la China Suárez.
Además, recordó que a su padre, Norberto, le molestaba que lo criticaban en los programas de espectáculos. A tal punto que, como manejaba un taxi, daba vueltas por América TV a la espera de que algún periodista lo parara y así poder aclarar todo lo que se decía sobre su hijo. "Él se volvía loco, yo le decía que no hiciera nada", reveló.
Finalmente, un día sucedió lo que Norberto estaba esperando, pero Nicolás acordó no decirlo públicamente. "Con esa persona me encontré y me lo contó, yo sabía la anécdota. Una persona se subió y ahí nació una anécdota súper tranquila pero nunca decidimos contarla. Él me dijo que no la iba a contar nunca. No la conté", explicó sin dar nombres. Y destacó que nunca se molestó por salir a desmentir las cosas que dicen sobre él porque tantos sus padres como sus amigos son conscientes de que muchas son mentiras.
Por último, el actor que protagonizará Me duele una mujer con Carlos Portaluppi y Mercedes Funes en teatro contó que nunca se sintió diferente por ser famoso y que sus padres, que lo acompañaron siempre, lo criaron con los pies en la tierra. Sin embargo, gracias a su trabajo pudo acceder a tener un departamento propio cuando era muy joven y un auto importado, algo que para su familia era impensado. Y entre tanto lujo, el actor descubrió que nunca había sido tan feliz como lo fue su padre al comprarse un auto sin tantos lujos.
"Me di cuenta que yo nunca había conseguido tener esa cara de felicidad, de orgullo", reconoció emocionado. Y aseguró que todo cambió desde que se convirtió en papá: "Hoy cuando miro a Rufina me doy cuenta de que me enseñó a sonreír y es como esa sonrisa que tenía mi papá. Y no es algo material, es mi hija que me dio un abrazo".