A medida que pasan las horas se van revelando detalles cada vez más conmovedores sobre la muerte de Naya Rivera (33), la actriz de “Glee” que fue encontrada en el lago Piru, de California el lunes por la mañana. En principio lo único que se sabía era que la actriz había salido a navegar junto a su hijo Josey (4) el miércoles 8 y que el niño había sido encontrado por otra embarcación horas más tarde. Estaba solo, durmiendo en el bote que habían alquilado y declaró que su mamá “se había tirado al agua y no había salido”.

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Pero en la conferencia que dieron las autoridades estadounidenses para confirmar que habían encontrado el cuerpo de Rivera, aseguraron que la artista habría perdido la vida tras salvar a su hijo para que no se ahogara. "Tras hablar con el hijo, sabemos que él y Naya nadaron en el lago en algún momento del día. El pequeño describió que fue ayudado por Naya para subir al bote, que lo empujó desde atrás hasta la cubierta", explicó Bill Ayub, el sheriff del condado, y aseguró que Josey vio cómo su mamá desaparecía en el lago. Asimismo, Ayub expuso su principal teoría sobre el caso: "Ella debe haber reunido suficiente energía para llevar a su hijo de vuelta al barco, pero no lo suficiente para salvarse".

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Desde que se supo que Naya estaba desaparecida, se puso en marcha un exhaustivo operativo de búsqueda que abarcó todo el bosque nacional Los Padres. Pero luego de las primeras horas en las que no encontraban rastros de la querida actriz, las autoridades comunicaron que ya no había esperanzas de encontrarla con vida. Finalmente, encontraron su cuerpo en las primeras horas del lunes gracias al trabajo de un equipo especializada de buzos y tecnología de gran nivel para trabajar bajo el agua.