Peter Bogdanovich fue uno de los directores que más influyó en el cine de los '70 y fue autor de títulos como "La última película" ("The last movie"), un éxito comercial y de crítica que floreció cargado de nominaciones al Oscar. El deceso del director norteamericano se produjo poco antes de las 01.00 de la madrugada (hora local estadounidense) en su casa de Los Ángeles, de acuerdo a un comunicado remitido por su hija, Antonia Bogdanovich.

Cinéfilo empedernido, reconoció que veía unas 400 películas al año, y fue crítico de cine antes que actor y luego director. Escribió reseñas en revistas como Esquire, Village Voice y The New York Times, al tiempo que trabajaba en el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MOMA), en la preparación de una antología de películas sobre Orson Welles y Howard Hawks. Empezó a trabajar como guionista en 1964, junto a Roger Corman, en "Los ángeles del infierno".

LEER MÁS: Thelma Fardín fue internada de urgencia por una intoxicación medicamentosa

Bogdanovich deja tras de sí un extraordinario legado como uno de los grandes representantes del llamado "Nuevo Hollywood", una corriente cinematográfica de marcado carácter contracultural y con una nítida influencia europea, así como puerta de entrada a legendarios directores como Francis Ford Coppola, Steven Spielberg, Martin Scorsese o George Lucas.

Fue reconocido como director desde el comienzo de su carrera con la espeluznante “El héroe anda suelto” (“Targets”, de 1968) que trata sobre un francotirador asesino, film en el que Boris Karloff aparece por última vez en un papel dramático y como estrella de terror, y "La última película" (“The Last Picture Show”, de 1971), su evocador retrato de un pequeño pueblo en decadencia que le valió ocho nominaciones al Oscar y lo catapultó a la fama. Luego estrenó la comedia "¿Qué me pasa, doctor?” (“What’s Up, Doc?”, de 1972) protagonizada por Barbra Streisand y Ryan O’Neal, y la película sobre un viaje en carretera de la época de la Gran Depresión "Luna de papel" (“Paper Moon”, de 1973), que le valió a Tatum O’Neal un Oscar a los 10 años y la que es considerada una de las mejores películas de comedia.

Su última película como director fue "Enredos en Broadway" ("She’s Funny That Way") en 2014. Posteriormente, el cineasta de anteojos apareció en episodios de "El nombre del juego" ("Get Shorty") en televisión y, recientemente en la película, "Willie y yo" ("Willie and Me", 2020). También apareció regularmente en "Los Soprano" como el Dr. Elliot Kupferberg, terapeuta del propio psicólogo de Tony Soprano, el Dr. Melfi.

El recuerdo del mundo del espectáculo

Tatum O’Neal, quien se convirtió en la actriz más joven en ganar un premio Oscar, a los 10 años, por su actuación en "Luna de Papel" (posteriormente, en 1976, fue la protagonista de "Nickelodeon") fue una de las tantas personas que trabajó con Bogdanovich que lo recordó en las redes sociales. O’Neal escribió en Instragram: "Peter fue mi cielo y mi tierra. Una figura paterna. Un amigo. Desde "Luna de papel" hasta "Nickelodeon" él me hizo sentir siempre segura. Te amo, Peter".

Murió Peter Bogdanovich, el confidente de Orson Wells y figura del "Nuevo Hollywood"

Otro que expresó su dolor fue Francis Ford Coppola a través de un comunicado: "Cielos, estoy en shock. Él fue un maravilloso y gran artista. Nunca olvidaré cuando asistí a la premier de "La última película". Recuerdo que al finalizar la función, el público estalló en aplausos que duraron más de 15 minutos. Nunca lo olvidaré, porque de hecho nunca experimenté una reacción como esa, y creo que Peter y su película se lo merecían. Que duermas feliz por toda la eternidad, disfrutando de la emoción de nuestro aplauso para siempre".

El reconocido director Guillermo del Toro recordó a quien también ejerciera como crítico cinematográfico, época en la que entrevisto a docenas de directores (Howard Hawks, Alfred Hitchcock, John Ford y Fritz Lang) siendo la más destacada la de Orson Wells, sobre la cual escribió un libro: 

"Peter Bogdanovich murió. Fue un amigo muy querido y un campeón del cine. Realizó obras maestras como director y fue el mejor ser humano. Él solo entrevistó y consagró las vidas y el trabajo de más cineastas clásicos que cualquier otra persona de su generación".