Karina Jelinek se suma a la lista de famosos que recurren a la subrogación de vientres
La modelo está decidida a ser madre soltera con el mismo método al que recurrieron Flor de la V, Topa y Marley, entre otros.
Hace tiempo que Karina Jelinek decidió no hablar públicamente de su vida privada. Sin embargo, a fines de enero se dispuso a jugar al verdadero o falso con sus seguidores de Instagram y cuando le preguntaron si quería ser mamá, reveló que es algo de lo que se está ocupando actualmente. "Verdad absoluta, estoy en eso", escribió la modelo y agregó: "Ya tengo el donante".
Y aunque en ese momento no aclaró a qué método iba a recurrir, días más tarde Tomás Dente confirmó que la exparticipante de “Cantando 2020” “está considerando alquilar un vientre”. Así, la morocha se sumaría a la larga lista de famosos que viajaron al exterior para cumplir el sueño de ser padres.
La primera en hacerlo fue Florencia de la V, quien se convirtió en mamá de los mellizos Paul Alexander e Isabella el 25 de agosto de 2011 a partir de una subrogación de vientre en Los Ángeles, Estados Unidos, y en ese momento fue toda una novedad en el mundo del espectáculo. “Ellos ya saben cómo llegaron a nuestras vidas y es súper natural para ellos cómo llegaron a casa. Me preguntaron hace más de dos años y lo único que teníamos que hacer era responder”, contó la artista cuando sus nenes tenían 6 años.
Y aunque en su momento fue muy criticada por no haber adoptado en Argentina, Flor terminó abriendo camino para muchos colegas. De hecho, en 2017 hubo un “baby boom” en la farándula local cuando Marley, Luciana Salazar y Flavio Mendoza decidieron ser padres de la misma manera.
El conductor de “Por el mundo en casa” compartió todo el proceso desde que Mirko estaba en camino y hasta ha entrevistado a Brittany, la mujer que lo llevó en su vientre, en su programa.
"Tuvimos una charla vía Skype. Vi que eras una buena persona, que vas a la Iglesia, tenés buen humor. Yo dije: "Ella tiene que ser la señora que traiga a luz a Mirko", reveló el presentador, mientras que la mujer confesó que al conocer el fuerte deseo de Marley de convertirse en papá enseguida quiso ayudarlo. La química entre ellos fue inmediata y desde entonces están en contacto.
"Siempre iré con la verdad, la única manera de explicar su llegada al mundo y de que entienda lo deseado que fue. Él tiene toda la historia contada y con imágenes sobre quién es la donante de óvulos, de algún modo, su mamá biológica. Y cuando quiera, podrá ver las fotos de ella, la de su tío, y la de sus abuelos rusos", explicó el conductor en otra entrevista.
Sin embargo, Luli no corrió con la misma suerte. En plena separación con Martín Redrado, la panelista de “Polémica en el bar” quiso ser madre soltera y por problemas de salud decidió no llevar a su bebé en su vientre. Y aunque todo salió bien durante el embarazo, en el momento de parto, algo se rompió entre la mediática y la madre gestante, quien le impidió que estuviera presente en ese momento.
"Tengo que resignar un momento muy especial en mi vida, ¿pero cómo no se lo voy a dar a la madre que cuidó a mi beba durante nueve meses? Es lo menos que puedo hacer", dijo Luli en un principio. Pero, semanas más tarde reveló que cortó cualquier tipo de vínculo entre su nena y la mujer.
En cambio, Flavio Mendoza tuvo una experiencia muy satisfactoria. “Cuando me reuní en Miami con Giselle, pude darle un beso a la panza, tocársela, y me largué a llorar: sentí que en su vientre estaba mi semilla”, reveló el productor en relación a la mujer que ayudó a traer a Dionisio al mundo y desde el nacimiento del nene se han encontrado varias veces en Miami.
Quien también pudo ser papá gracias a este método fue Diego Topa, quien pasó los primeros meses de la pandemia en Estados Unidos por el nacimiento de Mitaí, a quien no muestra en sus redes, pero sí comparte su alegría por estar ejerciendo su rol de padre, algo con lo que soñó mucho tiempo. “Cada día que va pasando me enamoro más de todas tus ocurrencias, de tus risas, de tus primeras palabras, ya caminas por todos lados con una libertad única”, le dedicó a su hijita en su primer cumpleaños.
En el caso de Jelinek, si bien no dio más detalles, años atrás había manifestado sus ganas de tener un hijo.“Me gustaría que mi hijo fuese feliz y todavía no se descubrió el gen de la felicidad. Elegir el bebé perfecto es una posibilidad que hoy existe gracias a la ciencia, pero prefiero tener uno a la antigua”, dijo en una entrevista y enumeró los rasgos que le gustaría que tuviera su descendencia: "Me gustaría que tuviese los ojos claros y la mirada de buena persona de mi papá, la boca de Sandro y la inteligencia de Favaloro, un genio de la medicina y de la vida".