El sábado 25 Julián Weich fue invitado a PH, Podemos hablar, el ciclo que conduce Andy Kusnetzoff y habló sobre el particular estilo de vida que lleva su hijo Jerónimo, quien luego de recorrer parte de América Latina se instaló en Córdoba para vivir alejado de la ciudad e inmerso en un profundo camino intelectual.

"En un momento me preocupé y dije: ‘Estoy criando un drogadicto y no me doy cuenta’. Porque probaba esto y lo otro. Pensaba: ‘Me equivoqué, me equivoqué... ¿cómo lo recupero a este pibe?", fue la frase que más repercusiones tuvo en los medios. Y en medio del revuelo que generó, el conductor decidió contar un poco más sobre la vida de su hijo en Otra vez juntos, el programa que conduce junto a Maby Wells en La Uno (FM 103.1).

"Mi hijo a los 19 decidió irse de la vida citadina, hizo un viaje por el mundo. Empezó en el norte de mochilero y terminó en México y a medida que pasaban el tiempo y los kilómetros se iba despegando de la dependencia familiar, no la afectiva porque siempre estuvimos comunicados", relató. Y agregó: "Salvo cuando me decía: papá me meto en el monte en Perú, voy a estar 20 días sin señal, entonces yo sabia que por 20 días no iba a parecer. Al día 21 me preguntaba qué pasaba que no aparecía, al 22 esperaba que apareciera y con el tiempo aprendí que aparecía, entonces no me volvía tan loco. Con ver que estaba conectado, estaba tranquilo" .

Además explicó que era una fantasía pensar que su hijo se había alejado de su hogar para convertirse en un drogadicto. "Me di cuenta que no era por ahí el viaje, con el tiempo aprendí que su búsqueda era con él mismo y después de muchos años, y muchas idas y vueltas, lo acompañe por su viaje por Panamá y viví como vivía él. Pasamos varios días viviendo una vida bastante hippie y fue espectacular", recordó en referencia al viaje que compartieron cuando cumplió 50 años, en 2016.

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Pero luego de un tiempo recorriendo distintos países, el joven decidió retomar la vida que tenía antes de su viaje. "Mi hijo volvió a Capital Federal quiso volver a jugar al rugby y hacer la vida que hacía antes pero se dio cuenta de que le gustaba más viajar y estar en otro estilo de vida y fue ahí que se dedicó a seguir su camino. Ahora vive en Córdoba, en Los Hornillos", precisó el animador. Y aclaró: "Tiene obra social porque el papá se la paga, por mi tranquilidad. Si fuera por él no tendría y a mi me generaría un problema. Prefiero pagársela y estar tranquilo".

Por un último, destacó que ya no ayuda económicamente a su hijo y que se siente muy orgulloso del estilo de vida que lleva. "Hace un montón de cosas para subsistir, todas legales, sanas y hermosas. Es profesor de reiki, da charlas para empresas, vende inciensos, hace un montón de cosas para poder subsistir con su novia y están felices, con una vida mucho mas sana que la que tenemos acá", concluyó.