Iliana Calabró: "No es bueno acostumbrarse a la soledad, pero hoy no tengo tiempo para el amor"
La actriz recorre el país con la gira de Una noche en el hotel, la comedia que encabeza Pedro Alfonso, y asegura luego de dos años de pandemia, encuentra su alegría en las risas del público.
Hija de uno de los más grandes comediantes que tuvo la Argentina, Iliana Calabró supo abrirse camino por su cuenta. Con una formación de conservatorio, conoció la popularidad masiva de la mano de Marcelo Tinelli en Cantando por un sueño, certamen en el que se consagró como ganadora y se lanzó como cantante, a pesar de las críticas y burlas que recibió en sus primeras participaciones. Su carisma, sensibilidad y las ganas de superarse hicieron que se ganara el talento del público.
Con la misma tenacidad que demostró en el plano laboral, pudo superar las dificultades que se le presentaron en su vida privada, como su separación con Fabián Rossi en medio de un escándalo nacional o la muerte de Juan Carlos Calabró, a quien acompañó a sol y sombra durante su enfermedad. Y tanto arriba como abajo del escenario, siempre tuvo un objetivo claro: hacer reír.
Con un largo recorrido en televisión y teatro, y luego de dos años de pandemia, la actriz se encuentra en plena gira de Una noche en el hotel, la obra que encabeza Pedro Alfonso y que se ganó el Premios Carlos 2022 a Mejor Comedia, y el próximo viernes 20 de mayo se presentará en el Teatro Niní Marshall de Tigre. "Desde el Cantando que no vivía un éxito así", reconoce en diálogo con Noticias Argentinas.
Las claves para llenar los teatros en cada ciudad que visitan con Pedro, Pachu Peña, Rodrigo Noya, Camilo Nicolás, Sofía Macaggi y Julieta Bartolomé, asegura que consisten en haber formado un buen equipo de trabajo, del trabajo de Dabope al montar una comedia efectiva y, además, de las ganas con, las ganas de divertirse que tiene el público, luego de las dificultades que atravesó la sociedad y de las que la industria teatral no quedó exenta. "La gente lo disfruta y lo agradece. En todo este tiempo, quedó claro que el teatro es un lugar seguro, que no es un foco de contagios, y a esta altura ya estamos a un paso de la inmunidad de rebaño con las vacunas", señala.
Iliana es consciente de que la pandemia representó un golpe duro para muchos de sus colegas, pero ella no paró de trabajar. Se lució en la primera temporada de MasterChef Celebrity, condujo Buen plan en Net TV y pudo volver a hacer temporada teatral tanto en calle Corrientes como en Villa Carlos Paz. De esta manera pudo mantener activo su espíritu inquieto. "Yo no paro un segundo, si estoy de gira me la paso haciendo cosas para el teatro y si estoy en mi casa, me organizo para hacer de todo", explica.
Amante de la cocina, en su casa se come casero y disfruta de organizar meriendas y cenas junto a Coca, su madre, y Stefano, su hijo menor. "Yo soy más de los almuerzos, pero como ahora estoy con una rutina agitada, nos reunimos a la noche cuando tengo algún día libre, cocinamos y comemos rico", cuenta con entusiasmo. Otra de sus pasiones es hacer ejercicio, pero más allá de los resultados estéticos, destaca que mantenerse en movimiento es algo indispensable para un actor. "Yo entreno para poder estar bien en el teatro y para estar lista si me llaman para hacer cualquier tipo de papel. El medio tiende a encasillar y yo suelo hacer más comedias, pero el público también me ha acompañado en papeles dramáticos, en unipersonales o teatro de texto", destaca. "Yo nunca hago las cosas de taquito, siempre doy todo de mí y creo que por eso la gente me elige. Un día puedo estar al 100, otro no tanto, pero en todos yo doy mi mayor esfuerzo. Eso se valora", agrega.
Poco antes de que el mundo cambiara con la irrupción del Covid-19, Iliana se había distanciado del italiano Antonello Gandolfo, con quien estuvo varios años en pareja. Y luego de estar un mes cumpliendo la cuarentena en distintas partes del mundo, decidieron ponerle un punto final a su relación. Desde entonces, la exvedette no volvió a formar pareja. Soltera, con sus hijos grandes -y el mayor viviendo en el exterior-, dispone de su tiempo con independencia absoluta y su trabajo es el mayor destinatario. "Después de mis hijos y mi familia, mi carrera es mi mayor orgullo. Es algo con lo que siempre soñé y que disfruto mucho. Yo le debo tanto a la gente, que me encanta hacerlos reír, sacarme fotos a la salida de cada función y también compartir tiempo con mis compañeros", destaca.
A su vez, reconoce que disfruta de los momentos de soledad en su casa de Buenos Aires, algo que necesita después de estar tanto tiempo rodeada de personas. "No es bueno acostumbrarse a la soledad, pero hoy no tengo tiempo para el amor", desliza. Pero enseguida deja en claro que no se trata de una postura anti romántica ni mucho menos: "El amor es complicado y es lindo complicarse la vida por amor. Estar enamorado es el mejor estado del ser humano, algo que me encantaría que me vuelva pasar, no estoy negada ¿eh? Solo que ahora lo veo un poco lejano".