Guillermo Francella no para. A días del estreno de Granizo, que se convirtió en la película más vista en Netflix en 32 países, el actor se encuentra en pleno rodaje de una serie y espera el estreno de El encargado en la plataforma Star+. Sin embargo, la vorágine laboral no lo aleja de la realidad del país.

"La inflación es un flagelo vomitivo. Estornuda Estambul y nos engripamos nosotros, nadie le puede encontrar la vuelta. Es algo que te desvanece, no me gusta ser escéptico. No soy antidemocrático ni agitador, al contrario, pero no puedo negar esta realidad", declaró el destacado actor en una entrevista con Cristina sin vueltas, en Radio Rivadavia. "Creo que el cambio va a demorar. Pasan los años y no es sencillo lo que se vive en la Argentina. Tampoco no podeos hacer grieta, porque es algo histórico", agregó y señaló que nuestro país "nunca tuvo cierta paz".

Sobre el éxito de Granizo, dirigida por Marcos Carnevale, reconoció que intuía que le iba a ir bien en territorio argentino. "Es una película muy popular, muy al corazón, pero en el mundo, no. Fue muy fuerte que haya generado lo que generó", le contó a Cristina Pérez y su equipo. "Me llama la gente de Netflix diciendo que es abrumador el éxito que tuvo. Estamos todos los que participamos muy felices", sumó.

Más allá del desafío que representaba filmar una película exclusiva de una plataforma, sin pasar por las salas de cine, para a Francella lo sedujo la cantidad de temas que toca el guión, que se mete en vínculos familiares, la fama y la "cancelación" en las redes sociales, un universo poco conocido por el actor. "No tengo redes, pero me pongo un nombre de fantasía para leer la inmediatez de alguna nota o de algo que está ocurriendo", confesó.

Por otra parte reveló que tendrá en una participación en Nada, la nueva serie de Gastón Duprat y Mariano Cohn, protagonizada por Luis Brandoni y Robert De Niro. "Me gustaría muchísimo ver a De Niro y estar con él", reveló y se definió como "cholulo".

Además, hizo un balance sobre su prolífica carrera: "Vivo de lo que amo hace muchos años y soy muy feliz con eso. No sé si me quedan asignaturas pendientes. Vivo un presente divino desde hace muchos años y lo transito con mucha felicidad, porque cuando uno vive de la vocación que tuvo de chiquito es fantástico".