Lionel Messi no sólo se formó y fue ídolo en Barcelona haciéndole ganar al equipo vario títulos, sino que en esa ciudad construyó su hogar, su familia y su grupo de amigos. Probó suerte en Francia, pero no se la hicieron fácil hasta que desembarcó en Miami y de la mano de David Beckham se convirtió en amo y señor de la ciudad. 

Fue convocando uno a uno a sus amigos, por cierto también cracks del fútbol que brillaron en Barcelona. Llegaron Sergio Busquets y Jordi Alba y finalmente hoy debutará el uruguayo Luis Suárez. 

Su llegada es una gran alegría para toda la familia Messi y en especial para Antonela Roccuzzo que recuperó la presencia de su gran amiga, Sofía Balbi, la mujer de Suárez. Ellas iban en Barcelona a ver a sus maridos al estadio, mandaron a sus hijos al mismo colegio y compartieron con sus familias las vacaciones, muchas veces en yates privados en los que recorrieron el Mediterráneo.

Antonela y Sofía vivieron en el barrio Castelldefels y allí gestaron su emprendimiento que duró poco, pero las tuvo muy entusiasmadas. En 2017 probaron suerte junto a Ricky Sarkany al intentar imponer su calzado en Barcelona. Luego optaron por acompañar a sus maridos y dedicarse de lleno a las mudanzas y la educación de sus hijos: ambas son madres de 3.

Se distanciaron (sólo físicamente) mientras Messi jugó en Francia y Suárez en Uruguay y Brasil, pero se reunieron en el Mundial de Qatar y luego se encontraron en Argentina para pasar juntos la Navidad.
 

Ahora vuelven a compartir la vida y el mundo está atento a lo que hacen sus maridos dentro de las canchas, pero también miran de cerca a estas amigas que marcan tendencia y estilo cada vez que aparecen. A Antonella la siguen más de 39 millones de personas en Instagram, mientras que a Sofía la siguen 2 millones.

El dream team soñado por Messi en el Inter de Miami se enfrentará este viernes desde las 22 (hora argentina) en un amistoso contra la selección de El Salvador en el Estadio Cuscatlán de ese país. El debut oficial en la MLS será el 21 de febrero fente al Real Salt Lake en el estadio DRV PNK Stadium de Fort Lauderdale.