El desafío del "Jueves de última chance" consistía en preparar un plato salado usando solo tres utensilios y pocos ingredientes. Y esas limitaciones hicieron que Dani La Chepi recordara los momentos más difíciles de su vida. "¿Sabés el hambre que pasé yo, 'bebo'? Cuando me quedé sin laburo en el 2015 vendí absolutamente todo lo que había en mi casa para darle de morfar a mi hija. Botas, computadora, todo lo que tenía lo vendí. Además de trabajar de cualquier cosa, obviamente", le contó a Santiago Del Moro.

Y explicó cómo haber sido despedida de la radio en la que trabajaba la impulsó a convertirse en influencer: "Me quedé sin laburo y de la miseria que estaba pasando pensé en hacer videos, quise ser mi propia mánager. Hoy en día le agradezco a la radio que me echó porque si no yo me hubiera quedado ahí sentada, total yo tenía mi sueldito...".

Además, habló de su historia familiar y las necesidades económicas que vivió en su infancia. "No éramos pobres pero éramos una familia humilde. A mi viejo no le pagaban en la fiambrería y él traía abajo de la campera de gamuza con queso para que morfáramos. Cuando pasas esas cosas... ¿de qué te vas a quejar? Nunca nos sobró nada pero creo que uno de las miserias sale, los argentinos somos sobrevivientes", dijo visiblemente conmovida. Y concluyó: “Nunca nos sobró nada, pero yo creo que de las miserias los argentinos somos sobrevivientes. Nos vamos a quedar sin laburo veinte mil veces, vos, yo y el que está mirando”.

Finalmente, Dani presentó un plato de pollo al champiñón con papas, batatas y panceta al que llamó "Isabella" en honor a su hija y emocionó al jurado. "Es muy simple, pero muy completo a la vez. Como de casa o de restaurante súper clásico", señaló Damián Betular y destacó que la participante hizo un "muy buen trabajo" en la cocina. "Este plato tiene sabor a hogar. Cocinaste con mucha confianza, sin quejarte de nada por estos elementos que tenías a disposición. Muy bien realizado, cumpliste plenamente la tarea. Gracias por llevarnos a todos en casa", manifestó Donato De Santis. Mientras que Germán Martitegui aseguró que no fue el mejor plato a nivel técnico pero que logró emocionarlo.

“¿Qué te dice tu hija?“, preguntó Del Moro luego de las devoluciones del jurado. “Ella está muy orgullosa y lo más lindo es darle el ejemplo de que podés hacer todo lo que quieras. Yo no sabía hacer nada”, dijo la influencer, contenta por sus logros. Pero la alegría le duró poco, ya que más allá de los elogios que recibió, los cocineros decidieron enviarla a la gala de eliminación del domingo. “Me mostraron el chupetín y me lo sacaron: ‘ahora no, primero te comés la comida’, me dijeron”, cerró la rubia.