A diferencia de otros años, en 2021 Marcelo Tinelli perdió su reinado en la televisión de aire. Durante más de tres décadas, todo lo que tocó el conductor se convirtió en oro. Sin embargo, el público ya no lo elige como antes y por este motivo, ShowMatch sufrió varios cambios en los últimos meses. El cambio de horario, homenajes, búsqueda de nuevo talentos y la búsqueda de la emoción sobre las características peleas mediáticas tuvieron efecto solo por pocas galas. Pero de la mano de Mariano Martínez y L-Gante el programa volvió a repuntar y pasó los dos dígitos de rating.

El ciclo de eltrece ya había presentado algunas mejoras, con un promedio de 10.7, puntos el lunes 23, con el ritmo "Salsa de a 3", que siempre lleva nuevos personajes a la pista, ya sea del ambiente artístico a familiares de los famosos. Y el martes, Bienvenidos a bordo -el ciclo que conduce Guido Kaczka- le dejó casi 14 puntos de "piso". Al inicio del programa del "Cabezón", las mediciones bajaron a 10.8, pero con la aparición de Martínez en la pista, quien se sumó para bailar junto a Luciana Salazar y Jorgito Moliniers trepó a 11.7, un logro para los tiempos que corren.

Cabe señalar que el actor está en un momento de alta exposición por las cosas que hace en las redes sociales: desde bailes y videos virales de Tik Tok hasta el lanzamiento de su carrera como cantante, que causó muchas controversias. “Lo de las redes es una diversión, es para pasarla bien, lo hago para distraerme”, manifestó. Y tras afirmar que las críticas no lo afectan, agregó: "Estamos de paso en esta vida, si no hacés lo que te gusta o te divierte, sin que te importe el qué dirán, te encontrás a punto de partir no habiendo disfrutado y te lo vas a reprochar toda la vida".

El plato fuerte de la noche fue L-Gante, quien hace unos días regresó al país luego de quedar varado en México. "Lo prometido es deuda", dijo al entrar al estudio y reveló que hace tiempo que venía hablando con la producción para estar junto a Tinelli. Acompañado por Claudia, su mamá, Elián Ángel Valenzuela -así es su verdadero nombre- presentó sus temas más populares e hizo bailar a todos en el estudio.

Eso sí, a nivel audiencia llegó a hacer picos de 10 puntos pero no alcanzó los mismos números que Mariano Martínez, ya que su show compitió directamente con La Voz Argentina, el caballito de batalla de Telefe que no baja de los 20 puntos diarios. También hubo un momento sentimental cuando el cantante oriundo de General Rodríguez habló de su vida previa a la fama. 

"Esto es parte de mí, y de mi fe, lo tomo como que recién empieza, me voy a perfeccionar. Vengo de una vida que me puso muchas complicaciones. Nunca dije que no lo iba a hacer. Trabajé, renuncié", contó. Y agregó: "Mi mamá trabajó toda la vida, estuve solo en casa, vagando en la calle, no tuve padre. Y eso me llevó a no decepcionar a mi mamá, me orientó a todo. No tuve a nadie que me esté poniendo los puntos. Pero solo me di cuenta de eso".

Si bien la participación del "cumbiero" fue celebrada en las redes sociales. Marcelo no corrió con la misma suerte, ya que le dedicaron varios memes argumentando que su fanatismo por L-Gante no era genuino. Pero más allá de los comentarios negativos, quedó claro que el público espera ver caras nuevas en su programa.