Andrea Rincón habló sobre sus adicciones: "Empecé a consumir a los 15 años"
En una entrevista con Gastón Pauls en "Ser libres", la actriz recordó cómo se sentía durante su adolescencia y las consecuencias que le generó el consumo de drogas en su vida.
A siete años de su internación en una clínica psiquiátrica para tratar su problema de adicciones, Andrea Rincón prestó su testimonio a "Ser libres", el programa que conduce Gaston Pauls en Crónica TV, para visibilizar las consecuencias que le trajo a su vida el consumo de drogas.
"Arranqué muy chica. Empecé a consumir a los 15 años con un novio que tenía. Empezás de a poquito, estaba bueno porque hablábamos y había una parte que adormecía y la fragilidad que yo tenía ya no existía. Veía las cosas de otra manera hasta el otro día estaba a diez metros bajo tierra. Y lo mismo me pasó con el alcohol, siempre fui muy introvertida y el alcohol me volvía extrovertida y lo usé como una muletilla", explicó la flamante participante de "MasterChef Celebrity 2".
Y contó que tras rehabilitarse debió cambiar su manera de vincularse con el mundo. "Después de la recuperación tuve que aprender a vivir, hasta para tener una cita, porque nunca había tenido una cita con un hombre sin un vino de por medio", señaló y aseguró que superar su momento más oscuro le permitió amigarse con ella misma.
Pero en su etapa más difícil, su objetivo era acabar con su vida. "Antes de internarme llegué a tocar fondo. Mi fin y mi cometido era morirme. Lo tenía clarísimo, pero sabía que si me suicidaba tenía que suceder de una manera que no parezca, porque ya había tenido un intento de suicidio y vi como dejé a todo el mundo alrededor y me dije: 'no puedo hacerle esto a alguien que amo'", reveló y señaló que siempre le costó vivir "en un mundo tan hostil".
Sin embargo, actualmente se muestra orgullosa de su presente. "Estoy en un lugar tan lindo, tan hermoso y recuperé. Yo me levanto todos los días feliz de quién soy. Estoy en paz. Cuando me voy a dormir, cuando apoyo la cabeza en la almohada. Trato siempre de ser mejor", aseveró. Y concluyó: "La cocaína te lleva a un lugar que puede ser un viaje... Es el infierno. Así como conocí al diablo conocí a Dios. Y sé cómo si se me hubiese liberado la verdad, lo que pasa es muy tentador. De repente estás ahí y dejó de ser tan bonito. Después hay un lugar de vacío".