A casi dos meses de debutar como conductor de Intratables, Alejandro Fantino habló de los cambios que quiso hacer en el programa, las críticas que recibió y cómo encontró su lugar en el ciclo de América TV. "En los últimos diez días encontré la comodidad en el programa", reconoció y se definió como un "nómade profesional", por la forma en la que 27 años de carrera ha trabajado en distintas áreas del periodismo, como el deporte, la política y el espectáculo.

Sobre los cambios que implementó en el ciclo, como el segmento en el que compartía una cenar con los invitados durante las entrevistas, en una entrevista con Pasa Montagna en Radio Rivadavia señaló:  "El programa tiene diez años, los discursos de época dominan la televisión, y hace 15 años el discurso era el show de Marcelo Tinelli con Fort, la peleas y los bailes… Hace dos años lo que rinde son los formatos, como 100 argentinos dicen, La Voz Argentina, MasterChef, etc".

"El discurso de la política hace seis o siete años era de exacerbación, de enojo, de batalla dialéctica. Hoy es necesario bajar los decibeles porque la gente necesita menos grito, menos energía, pero Intratables no puede bajar de 5ta a 1ra, pero me pareció que un formato de unión y de mesa, que se hizo largo, podía funcionar", agregó. Y remató: "No me dieron la unidad de terapia intensiva del Hospital Gutiérrez, me dieron un programa de televisión. Tampoco es tan importante".

Teniendo en cuenta su recorrido en los medios, definió a Intratables como "el mayor desafío periodístico, profesional e intelectual" de su carrera por la forma en la que se prepara para cada emisión. "Estoy haciendo un doctorado en televisión. Todo lo que me deja es aprendizaje", subrayó. Por otra parte señaló que no le teme a los comentarios negativos: "La crítica es agua para mi laburo".

También se metió de lleno a los cambios que surgieron en el panel, como la salida de Débora Plager, con quien aseguró que se lleva "muy bien": "Intratables no es mío, no me hago cargo de las decisiones ni de la gente que forma parte del programa”, enfatizó. Y continuó: "Yo no tengo problemas con ninguna persona del medio. No tengo vetados y no vetados. Cero".

Por último, se refirió a las secuelas que le dejó el coronavirus. “Nunca más recuperé el olfato y ya pasó un año. Me pongo un perfume y no siento todas las notas del aroma. Pero no me importa en lo más mínimo, es lo que me dejó el Covid-19 y en algún momento volverá", concluyó.