YPF acelera su crecimiento: fuerte impulso del shale y consolidación de proyectos estratégicos
YPF presentó un balance sólido para el tercer trimestre del año, marcado por un destacado crecimiento en su producción de petróleo shale y un incremento significativo en las exportaciones, reflejo de su estrategia de expansión y diversificación en la matriz energética.
Producción shale en ascenso
La producción de petróleo shale promedió 126 mil barriles por día (kbbl/d) en el trimestre, lo que representa un crecimiento interanual del 36% y un incremento del 11% respecto al trimestre anterior.
Este segmento, impulsado por la actividad en Vaca Muerta, ya constituye el 49% de la producción total de petróleo de YPF, consolidándose como el pilar principal de su desarrollo.
El aumento en las exportaciones de petróleo Medanito también fue significativo: un 111% más que en el mismo trimestre de 2023 y un 37% más que en el segundo trimestre de este año. Estas exportaciones promediaron 39 kbbl/d, equivalentes al 15% de la producción total de petróleo, con un mercado internacional que sigue siendo atractivo para los crudos ligeros de alta calidad.
Inversiones y estrategia 4×4
Durante este período, YPF destinó 1.353 millones de dólares en inversiones, de las cuales más del 70% se orientaron al segmento upstream, principalmente en actividades shale. Este enfoque está alineado con la estrategia 4×4 de la compañía, que busca maximizar la productividad en las áreas más competitivas de Vaca Muerta.
Entre los proyectos destacados, YPF avanzó un 50% en la construcción del primer tramo del oleoducto Vaca Muerta Sur, que conectará la región con Allen (Río Negro). Este tramo, de 130 km, es parte de una inversión de 200 millones de dólares. Además, está en marcha la planificación del segundo tramo, que contempla un oleoducto para exportaciones, infraestructura de almacenamiento y monoboyas para operar buques tipo VLCC. La inversión proyectada para esta etapa asciende a 2.500 millones de dólares.
EBITDA en expansión
En términos financieros, el EBITDA ajustado alcanzó los 1.366 millones de dólares, lo que representa un crecimiento interanual del 47%. Este aumento se atribuye a una combinación de factores: recuperación en los precios locales de combustibles, mayor producción de hidrocarburos shale y altos niveles de procesamiento en las refinerías. No obstante, este desempeño fue parcialmente contrarrestado por mayores costos en términos reales y una reducción en la producción convencional, especialmente afectada por las condiciones climáticas adversas en la Patagonia durante julio.
Proyectos estratégicos
YPF también avanzó en su Proyecto Andes, con la firma de nueve acuerdos de compraventa que involucran 25 áreas, incluidas siete en Tierra del Fuego y un clúster aprobado en Chubut. Estas iniciativas buscan dinamizar la exploración y producción en nuevas zonas del país, diversificando aún más su cartera de activos.
Perspectivas futuras
Con un crecimiento sostenido en la producción shale, un marcado incremento en las exportaciones y proyectos estratégicos en marcha, YPF reafirma su liderazgo en el sector energético argentino. La apuesta por el desarrollo de infraestructura, como el oleoducto Vaca Muerta Sur, no solo fortalece su posición en el mercado interno, sino que también abre nuevas oportunidades para consolidar a Argentina como un jugador clave en el comercio energético internacional.
Este desempeño se enmarca en un contexto desafiante, con fluctuaciones en los costos locales y desafíos climáticos, pero subraya la capacidad de la compañía para adaptarse y maximizar su competitividad. Con estas iniciativas, YPF no solo avanza en su estrategia de crecimiento, sino que también contribuye a potenciar la economía energética del país.
(Artículo realizado por el Servicio de Noticias de Canal 7 Neuquén).