La compañía Vicentin logró reabrir, después de más de un año de inactividad, la planta de girasol más importante del grupo, luego de un acuerdo con la Unión Agrícola de Avellaneda (UAA), según surge del informe mensual que elabora el grupo.

"En lo referente al girasol, durante febrero se suscribió un acuerdo de molienda con la UAA. Esto es un hito sumamente importante puesto que permitió poner en marcha la planta luego de que la misma estuviera parada por algo más de un año", indicó la firma agroexportadora.

El informe es presentado mensualmente por la compañía a los acreedores, al juez que lleva la causa por el concurso de acreedores y a los síndicos y allí detallan la "evolución de la marcha de los negocios y las actividades de la Sociedad".

En el relevamiento, la firma destacó que durante febrero las plantas de la sociedad continuaron operando bajo la modalidad de fazón -por mandato de terceros-, alcanzando una molienda de 385.000 toneladas.

"Los ingresos por fazones ascendieron a la suma de US$ 6.900.000. Adicionalmente, la Sociedad brindó servicios de alquileres y almacenaje de granos, alcanzando una facturación aproximada de U$S 180.000; y servicios de elevación de productos líquidos y sólidos, alcanzando una facturación estimada de US$ 100.000", puntualizó.

En cuanto al aceite fraccionado, la venta del periodo fue por un total de 2.260 toneladas destinadas a mercado interno, alcanzando una facturación de $312.000.000 y 1.400 toneladas a exportación, alcanzado una facturación aproximada de US$ 1.650.000, detalló la firma.

"En lo que al negocio de Alcoholes se refiere, durante el período la Sociedad comercializó aproximadamente 1000 metros cúbicos, lo que equivale a una facturación aproximada de $46.000.000", agregó el informe.

En lo que se refiere a etanol, la venta fue de 547 metros cúbicos, con una facturación de $26.148.177,40 más IVA.

"Estos fondos están retenidos por el Banco de la Nación Argentina por una garantía de créditos otorgados", aclaró Vicentin.