La diputada nacional del Frente de Todos Fernanda Vallejos propuso hoy una batería de medidas para mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores y para contener la inflación, entre las que se destacan un incremento de los salarios reales, una suba de tres puntos a las retenciones al maíz y la fijación de cupos exportables.

Estos dos últimas medidas tiene como objetivo "bajar el precio y garantizar el abastecimiento interno del insumo de engorde del ganado, para desacoplar los precios internacionales de los que pagamos en las carnicerías argentinas. Además, elogió la decisión gubernamental de frenar la devaluación y de acotar a un dígito las subas de las tarifas de servicios públicos", explicó al participar de un ciclo de charlas de la agrupación "Perspectiva Sur".

"Tenemos un problema, con dos caras de la moneda: ingresos bajos y precios altos. Naturalmente, a esta realidad, se asocian los grandes dramas sociales que hoy lastiman a nuestra sociedad: el avance de la pobreza, el avance de la desigualdad y los altos índices de desempleo y de informalidad laboral", advirtió.

En este contexto, la legisladora kirchnerista sugirió una serie de alternativas para mejorar el ingreso de los asalariados y contener la inflación.

"Por el lado de los ingresos, el Estado tiene algunas herramientas que puede activar. Por ejemplo, los salarios de los trabajadores públicos, son los más atrasados. Es algo que se podría mejorar. Lo mismo podemos decir de las jubilaciones, pensiones y otros ingresos asociados a la seguridad social, como la AUH. El SMV también es una herramienta valiosa para fijar un piso a los salarios, empujando también los informales, y debería tender a ubicarse en niveles próximos al valor de la canasta básica, que hoy supera los $60.000", propuso.

La presidenta de la comisión de Finanzas de la Cámara baja recordó que "los aumentos en los ingresos, que redundan en mejoras sobre el consumo y la demanda agregada, traccionan el nivel de actividad y, a la postre, el empleo y la inversión". 

En este sentido, Vallejos valoró que el camino elegido por el Gobierno en términos tarifarios en el actual contexto de emergencia económica haya sido el congelamiento en 2020 y "aumentos moderados" para este año, del 9% para electricidad y 6% para el gas. 

"Aumentos de dos dígitos hubieran significado un mayor impacto en la inflación y menor ingreso disponible para las familias", evaluó, en tanto que también destacó "la decisión del equipo económico de desacelerar la tasa de devaluación en este 2021 es acertada, ya que fue uno de los impulsores de la inflación el año pasado”.