Vaca Muerta podría impulsar un superávit energético de US$ 25.000 millones
La Cámara de Exploración y Producción de Hidrocarburos (CEPH) presentó un panorama optimista sobre el futuro de la industria energética argentina.
La Cámara de Exploración y Producción de Hidrocarburos (CEPH) presentó un panorama optimista sobre el futuro de la industria energética argentina, proyectando un superávit comercial de US$ 25.000 millones para finales de la década. Este crecimiento exponencial estaría impulsado principalmente por el desarrollo de Vaca Muerta y la creciente demanda global de gas natural.
Un potencial energético sin precedentes
Nicolás Cantero, representante de la CEPH, destacó durante una audiencia pública que Argentina cuenta con recursos hidrocarburíferos suficientes para abastecer su demanda interna por más de un siglo en el caso del petróleo y dos siglos en el caso del gas natural. Este potencial, sumado a la creciente demanda global de energía y al desplazamiento del carbón por el gas natural como fuente más limpia, posiciona al país como un jugador clave en el escenario energético mundial.
Vaca Muerta, el motor del crecimiento
El desarrollo de Vaca Muerta ha sido fundamental para alcanzar estas proyecciones. La cuenca neuquina ha permitido no solo cubrir la demanda interna de gas y petróleo, sino también generar excedentes exportables. Según Cantero, la producción de gas natural podría crecer un 62% para 2030, alcanzando los 226 millones de metros cúbicos diarios.
Un futuro prometedor
La CEPH destaca que este crecimiento energético no solo generará un importante superávit comercial, sino que también impulsará el desarrollo económico del país, creando empleo y generando divisas. Además, permitirá reducir la dependencia de las importaciones energéticas y fortalecer la seguridad energética de Argentina.
El rol del GNL
La instalación de plantas de licuefacción de gas natural, como el proyecto propuesto para Río Negro, será clave para aprovechar este potencial exportador. El GNL permite transportar el gas natural a grandes distancias, lo que abre nuevos mercados para Argentina y la posiciona como un proveedor confiable de energía a nivel mundial.
Desafíos y oportunidades
Si bien el panorama es prometedor, existen desafíos que deben ser abordados para alcanzar estas proyecciones. Entre ellos se encuentran la necesidad de contar con una infraestructura adecuada para transportar y exportar el gas natural, así como la importancia de garantizar un marco regulatorio estable y atractivo para las inversiones.
En conclusión, el desarrollo de Vaca Muerta y la creciente demanda global de gas natural presentan una oportunidad única para que Argentina se convierta en un líder energético a nivel mundial. Sin embargo, para aprovechar este potencial es fundamental contar con una planificación estratégica a largo plazo y una inversión sostenida en el sector energético.