Una familia necesitó $232.427 mensuales para no ser pobre
La canasta utilizada para medir la pobreza subió por encima de la inflación.
La canasta básica subió 6,7% en junio último y una familia necesitó $232.427 para no ser pobre, informó el INDEC.
La variación mensual de la canasta básica alimentaria (CBA) fue de 5,2%.
Las variaciones de la CBA y de la CBT resultaron de 124% y 123%, en términos interanuales, y acumulan en el año incrementos de 55,1% y 52,4%, respectivamente.
Además, se necesitan $104.227 para superar el límite de la indigencia, un 5,2% por encima del mes anterior y 124% en los últimos doce meses.
El límite para no caer en la pobreza, medido por la Canasta Básica Total (CBT), ya había aumentado un 7,2% en mayo, un 6,3% en abril y el 8% en marzo. En febrero se vio el incremento más grande: 8,3%.
En tanto, el umbral para no llegar a la indigencia, marcado por la Canasta Básica Alimentaria (CBA), subió 5,2% en mayo, 7,3% en abril y 9% en marzo. El incremento más alto del año también fue el de febrero, con un 11,7%.
LEE: Inflación sin freno: alimentos y bebidas subieron más de 15 veces en casi seis años
El índice de canasta básica se conoció una semana después de la difusión del dato de inflación de junio, que registró un alza del 6%, lo que representó una caída en comparación con mayo.
El pasado 11 de julio, la Dirección de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires difundió el dato de canasta básica de junio en el territorio porteño, con aumentos similares al de la inflación que se vio a nivel nacional.
Una familia tipo porteña (matrimonio y 2 hijos menores) necesitó en junio más de $235.931 para no ser considerada pobre. Representa un incremento del 6 % en relación con mayo. Y más de $363.666,30 para pertenecer a la clase media. En ambos casos, sin incluir el alquiler.
En los 6 primeros meses de este año, la canasta básica de indigencia porteña -equivalente a la inflación de los sectores más pobres- subió el 57,5 % versus un 51,2 % de inflación promedio. Y la línea de pobreza, un 54,24 %.