“Si no aumenta el precio de la harina nos comprometemos a no aumentar los precios de los productos”, anunció Raúl Santonadré, presidente de la Federación Industrial de panaderos de la provincia de Buenos Aires al término de una reunión con el secretario de Comercio Roberto Feletti.

Bajo esta condición el representante industrial prometió que el sector que representa no subirá los precios hasta el 31 de diciembre, pacto similar al que selló Feletti con el sector cárnico.

El funcionario los recibió tras conocer informes que revelaron aumentos de entre 10 y 15% en los diferentes productos de panadería en los últimos días. De todas formas, el compromiso queda sujeto a una variable que los industriales no pueden manejar como es el costo de la materia prima.

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Un informe privado reveló que a octubre de este año la harina representa el 22% del costo de hacer un kilo de pan. En tanto, la mano de obra abarca el 51% y en tercer lugar se ubicaron los servicios de luz y gas en el 14%.

La incidencia de la harina subió 4 puntos porcentuales respecto de 2019, año que sirve como referencia para evitar los efectos de la pandemia en 2020.

La suba en el valor de la materia prima está vinculada al aumento que se produjo en los precios internacionales del trigo.

Dada esta circunstancia, la condición de mantener los precios si no se encarece la harina parece tener un impacto menor en relación a otras variables como por ejemplo el costo de la mano de obra, que se actualiza por paritarias que buscan equiparar una inflación superior al 50%.

En el informe de inflación que presentó esta semana, el INDEC indicó que el kilo de pan tiene un valor de $204,32 a noviembre y sufrió una variación promedio de 3,2% respecto a octubre.

Luego de la carne, el rubro panificado fue uno de los que mayores incrementos tuvieron el mes pasado. Por ejemplo, las galletitas de agua envasadas aumentaron 5,1% y las dulces 2,7%.