La campaña de trigo 2023/2024 sufrió una merma significativa en sus números a causa de las condiciones climáticas adversas, según indicó la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) en su informe de cierre.

Se desprende del informe de la BCBA que con las labores de recolección ya finalizadas se obtuvo un volumen de 15,1 millones de toneladas, que podría representar unos US$2.400 millones en exportaciones.

Pese a que la cosecha creció un 23,8% respecto del ciclo anterior, el nivel de producción estuvo bastante lejos de lo que se esperaba en un principio. 

Las primeras proyecciones indicaban la posibilidad de sembrar 6,3 millones de hectáreas y obtener un volumen de 18 millones de toneladas. Pero la falta de lluvias redujo esos valores a 5,9 millones de hectáreas (MHa) sembradas, la superficie más baja de las últimas cinco campañas. De esta manera, la falta de humedad dejó afuera de la proyección inicial unas 400 mil hectáreas distribuidas en el Oeste de Buenos Aires, Norte de La Pampa, Núcleo Norte, Núcleo Sur y Sur de Córdoba.

Aunque la situación fue más auspiciosa que la del periodo 2022/23, la campaña finaliza 3,1 millones de toneladas (MTn) por debajo del escenario inicial producto de la reducción del área implantada mencionada y heladas tardías registradas a comienzos del mes de octubre en una gran parte del centro del área agrícola afectado por la emergencia hídrica durante el período crítico.

La contribución que la cadena triguera realizará a la economía del país también deja un sabor agridulce, porque si bien en las exportaciones se produciría un considerable avance, el aporte que realiza la cadena de trigo a la economía podría ser menor al del año pasado, señalaron desde la entidad porteña.

De acuerdo con el informe de la BCBA, se espera que el Producto Bruto Agrícola (PBA) del complejo triguero sea un 9% inferior para 2024, debido a una caída del 29% en el precio del cereal. De acuerdo con la proyección de la BCBA la contribución llegará a US$2.900 millones, lo que representa una caída de US$300 millones respecto del ciclo anterior.

No obstante, sí será mucho mayor el ingreso de dólares provenientes de las exportaciones. Según el relevamiento, se enviarán al exterior alrededor 9,3 millones de toneladas durante esta campaña, lo que implicaría un salto en el volumen del 200% respecto a la campaña anterior cuando sólo se exportaron 3,1 millones de toneladas por la histórica sequía, que obligó a que haya una reprogramación de embarques hacia este ciclo agrícola-comercial.

Trigo: se prevé que la campaña aporte al fisco US$1.000 millones

Se espera así que las exportaciones de trigo se recuperen un 84%, generando ingresos por US$2.400 millones. Sin embargo, ese salto no se verá reflejado en la recaudación por derechos de exportación, ítem que tendrá un crecimiento de apenas 11% y alcanzará US$ 1.000 millones, como consecuencia de la postergación de embarques, que si bien se realizarán durante esta campaña comercial, el pago de retenciones ya se efectuó el año pasado al momento de declarar las exportaciones.