Por Antonio D'Eramo

Isela Costantini, ex Ceo de General Motors y de Aerolíneas Argentinas, se encuentra al frente del Grupo de Servicios y Transacciones (GST), un holding empresarial fundado en el año 2002 cuando los ex Banco Río, Pablo Peralta y Roberto Domínguez, inauguraron el Banco de Servicios y Transacciones. Si bien, Costantini se sumó a la gestión del emprendimiento privado, en mayo de 2017,  para ordenar la sociedad y desarrollar un plan de negocios a mediano plazo, las recientes novedades empresariales la muestran teniendo que aceitar el diálogo con los funcionarios del gobierno nacional y con figuras de gobiernos provinciales.

En el ámbito nacional debe interactuar con funcionarios de la Comisión Nacional de Valores o el Banco Central para consolidar las tres sociedades a las que reportan las empresas del grupo, GST, CMS y ST Inversiones. Se trata de un conglomerado de empresas que van desde los seguros de retiro y de vida Orígenes, donde Marcelo Mindlin es accionista, a la administración de fondos de inversión a través de la firma Quinquela y tienen participación en el sector del crédito a minoristas;  en una empresa de cobranza; concesionarios de rodados, e inversiones en el sector energético, agropecuario y en sociedades de bolsa.

Como sucedió en casi todos los sectores de la economía la pandemia sacudió los cimientos de la industria del seguro. Todas las empresas sufrieron la caída de la actividad económica y las compañías del mercado asegurador sufrieron los embates de la nueva normalidad.

En Argentina, existe un éxodo de empresas extranjeras, que por distintas razones prefieren abandonar el mercado local y esta situación fue rápidamente aprovechada por Isela Costantini que cerró la compra de MetLife Seguros, después de haber adquirido su compañía de retiro durante el año 2020.

En un comunicado oficial, el managment  de Orígenes Seguros afirmó, “Para Orígenes representa un salto cuantitativo y cualitativo en sus operaciones. Nos enorgullece seguir invirtiendo en el país y apostando por el desarrollo y crecimiento de la Argentina”.

Ahora bien, la inversión fue estratégica porque hubo un crecimiento significativo de las contrataciones de  los seguros de vida ante casos por Covid-19.

Fuentes del sector aseguraron a NA que las contrataciones de este tipo de cobertura tuvieron un crecimiento del 30% en el país. Una tendencia registrada desde marzo de 2020 cuando los operadores y agentes tomaron nota de las inquietudes de sus clientes por conocer acerca de algún tipo de protección específica por la contingencia producida a partir de la pandemia de Covid-19.

En el caso de la adquisición de MelLife por Orígenes Seguros, ésta última no suma ninguna rama aseguradora a su compañía pero sí accede a una cartera de clientes mayor que la consolida y posiciona en el mercado local, un mercado en el que crece también por sus vinculaciones políticas.

Por otra parte, fuentes de la Superintendencia de Seguros explicaron que las compañías tienen incentivos desde la parte impositiva para que este segmento crezca aún más en los próximos meses. Las coberturas incluyen una actualización por CER en los montos asegurados y existe, entonces, una cobertura contra la inflación que beneficia al cliente en un país con índices cercanos al 50% anual de crecimiento del costo de vida.

Pero, el ítem más interesante, es el que permite realizar una deducción en el impuesto a las Ganancias que, para el corriente ejercicio fiscal, puede tomarse hasta $ 24.000 en concepto de cuotas del seguro de la base imponible de Ganancias.

La conquista del  mercado asegurador de parte de Orígenes no se formaliza sólo desde el sector privado también se presentan como oferentes en el sector público.

Las contrataciones directas, tan usuales en los poderes ejecutivos desde el comienzo de la pandemia, permitió que Orígenes fuera adjudicataria de un millonario negocio vinculado a los seguros de vida de los empleados estatales de la provincia de Corrientes.

La maniobra fue cuestionada por la oposición al gobernador radical, Gustavo Valdés, por entender que se realizó por "vía de excepción" y sin dar aviso a los empleados ni a la Legislatura respecto del cambio de prestador ya que antes estaba asignado a Sancor Seguros o Nación Seguros. Además, cuestionaron que se evitó informar las condiciones en las que se rescindieron los contratos con las otras firmas.

Lo más sugestivo fue la autorización de un aumento del 3.692% en el cobro mensual de esas pólizas. Consultados por la NA los voceros de Orígenes se abstuvieron de hacer comentarios y desde el Gobierno provincial señalaron que “se ajustaron a derecho”.

El cambio implicó una "actualización" de valores. Según los recibos, a los empleados estatales se les descontó en septiembre $3,25 por este concepto. En octubre, tras la contratación por decreto de Orígenes Seguros de Retiro, el descuento pasó de $3,25 a ser de $120, lo que implica un incremento del 3.692%.

En Buenos Aires, funcionarios de la Superintendencia de Seguros de la Nación, explicaron a NA que la situación en la provincia de Corrientes se complicó por el seguro de vida individual que Orígenes agregó al seguro de vida obligatorio que deben tener los trabajadores de planta permanente del estado correntino. Te diría que los ejecutivos de Orígenes lo pusieron en el paquete y Valdés compró, en épocas de elecciones el tema se disparó.

La gestión de Isela Costantini avanzó, además, en la fusión de los Fondos Comunes de Inversión Megainver y Quinquela Fondos que al unirse se convirtieron en el sexto grupo del país.

Un Fondo Común de Inversión es un patrimonio formado por los aportes de un grupo de personas que buscan rentabilidad y asumen riesgo respecto a las inversiones que realizan. Los  aportes son administrados  por  un grupo de profesionales que generalmente invierten en plazos fijos, bonos y acciones locales o internacionales.

La decisión adoptada por el Grupo GST de fusionar su empresa FCI Quinquela Fondos con Megainver la convirtió en la primera fusión en el país entre dos gestoras de esta magnitud. Megainver, la empresa del economista Miguel Kiguel y Nora Trotta, es un fondo con experiencia en inversiones en renta fija latinoamericana que invierte en bonos corporativos y soberanos de Chile, Brasil y Paraguay. Lo hacen como una opción para los ahorristas en dólares que buscan proteger su capital y alejarse del riesgo argentino.

Fuentes del mercado bursátil aseguraron a NA que la fusión posiciona a los socios para un rebote de la economía post pandemia que no termina de generarse.

Según datos de los analistas de Criteria, la industria de Fondos Comunes de Inversión, administró en el año 2020, en plena pandemia, un total de US$ 9.949 millones, tan sólo el 28% de lo que administró en el año 2017, cuando trabajaba con 35.386 millones de dólares.

Desde entonces, sólo existieron malas noticias porque hubo caída de los activos financieros desde el año 2018 y un progresivo alejamiento de los inversores de los bonos y acciones argentinas.

A la espera de un repunte de la actividad las fusiones, en este rubro, podrían continuar para obtener una mayor participación de mercado. Entre las gestoras independientes y bancarias, las primeras poseen un market share (participación del mercado) del 37,8% y, las segundas, detentan el 62,2% restante.

La pandemia ha servido a Isela Costantini para que el grupo GST aproveche circunstancias típicas de los mercados regulados como el argentino que se amplifican con buenos lazos políticos y salir de compras donde observa una oportunidad.