Sin gastos de alquiler, una familia porteña necesita $59.208 para no ser pobre y $90.493 para ser de clase media
Hacen falta casi tres salarios mínimos para cubrir la canasta de pobreza en la Ciudad de Buenos Aires, que aumentó 4,4% en el mes y 42,2% en un año.
Una familia de cuatro miembros que vive en la Ciudad de Buenos Aires necesitó en marzo 31.525,59 pesos para no ser indigente, 59.208,24 pesos para no ser pobre y 90.493,40 pesos para ser considerada de clase media, de acuerdo con el último informe de la Dirección General de Estadística y Censos porteña.
Como en esos gastos no se tienen en cuenta el alquiler de vivienda ni las expensas comunes, los recursos podrían ser mucho mayores a los indicados por el organismo estadístico de la Ciudad, que a diferencia del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) reconocer seis estratos sociales en lugar de dos.
El INDEC dará a conocer el próximo jueves 22 de abril los niveles de pobreza e indigencia de marzo, que en su última medición de febrero alcanzaron valores de $57.997 y $24.575, respectivamente.
Con una inflación estimada para marzo en torno del 4% (el INDEC la dará a conocer el jueves 15), la Canasta Básica Alimentaria (CBA) que marca el limite de la indigencia aumentó en la Ciudad de Buenos Aires por debajo de los precios generales, con un alza del 3,3% en relación con los valores de febrero. De esta forma, se revirtió la tendencia de los últimos meses, en los que los gastos de indigencia crecieron más que la inflación general, debido al mayor peso de los alimentos en el nivel global.
En esta oportunidad, la primera tanda de aumentos en la tarifa de subtes, así como la de taxis y los estacionamientos incidieron en el distrito porteño para que los servicios aumentasen más que los bienes.
Por su parte, la Canasta Básica Total, que marca el tope de la pobreza, tuvo el mes pasado una suba del 4,4%, similar al de la Canasta Total (CT) que en diferentes proporciones establece los límites del sector medio frágil, la clase media y los sectores acomodados. En la medición de los últimos doce meses la canasta de la indigencia fue la que más aumentó, con un 48,10%, en tanto la de la pobreza tuvo un alza del 42,2% y la de la clase media el 39%.
A diferencia del INDEC, que sólo mide la pobreza y la indigencia, la DGEyC reconoce seis estratos sociales en su clasificación. En el caso de una familia de cuatro integrantes, se necesitaron 31.525,59 pesos para no ser indigente, en tanto para no estar en situación de pobreza se requirieron 59.208,24 pesos.
El estrato de los "no pobres vulnerables" percibió en marzo ingreso de 59.208,24 a 72.394,71 pesos, el sector medio frágil de 72.394,72 a 90.493,39 pesos, el de clase media de 90.493,40 a 289.578,87 pesos y los sectores acomodados 289.578,88 pesos o más.