El secretario de Energía defendió ante el Senado el proyecto de promoción de inversiones hidrocarburíferas
Darío Martínez aclaró que la norma "no modifica las potestades que ya tienen las provincias, no estamos discutiendo ni la propiedad ni el poder concedente, y tampoco tocamos ninguna potestad tributaria".
El secretario de Energía, Darío Martínez, destacó que el proyecto de ley de Hidrocarburos permitirá "asegurar el autoabastecimiento" de petróleo y aumentar las exportaciones, al defender en el Senado la iniciativa oficial.
Martínez dijo que se busca "generar una herramienta legislativa que nos permita primero asegurar el autoabastecimiento de hidrocarburos, para luego ir por un aumento de producción que genere saldos exportables".
"El cumplimiento de estos objetivos permitirá un sostenido ingreso de divisas, fortaleciendo la posición del Banco Central", sostuvo.
Martínez concurrió a un plenario de las comisiones de Energía, Minería y Combustibles, y Presupuesto y Hacienda, para brindar detalles sobre la iniciativa presentada por el presidente Alberto Fernández.
El funcionario dijo que el proyecto no vulnera la autoridad de la provincias y aclaró que "son las dueñas de los recursos y se fortalecerán, porque el aumento de la producción se reflejará en el aumento de regalías".
"No es una nueva ley de hidrocarburos sino un régimen de promoción hidrocarburífera", resaltó Martínez.
Agregó que la norma "no modifica las potestades que ya tienen las provincias, no estamos discutiendo ni la propiedad ni el poder concedente, y tampoco tocamos ninguna potestad tributaria".
"En cuencas con rendimiento distinto, tenemos que tener incentivos distintos, y lo importante es desarrollar todas las cuencas y cuidar los puestos de trabajo en cada una", explicó el secretario a los senadores.
Martínez aclaró que el proyecto de promoción de inversiones en hidrocarburos "no exime de ninguna responsabilidad ambiental, no va en contra de ninguna normativa ambiental y contempla un capítulo sobre sustentabilidad energética".
El proyecto estipula que la ley tendrá una vigencia de 20 años, brindando estabilidad tributaria e incentivos y tratamientos diferenciales en lo tributario, arancelario y cambiario.
La norma otorga un marco de previsión para el sector que permita incrementar la producción de petróleo y gas natural, junto con un creciente proceso de industrialización local y la generación de exportaciones en escala, según la Secretaría de Energía.