El Banco Central transfirió $160.000 millones al Tesoro en lo que va del mes, para hacer frente al aumento del gasto, impulsado por la campaña electoral. De ese total, el jueves de la semana pasada emitió la cifra más alta del año en cuanto a transferencias de utilidades: $120.000 millones. Las consultoras económicas estiman que la emisión trepará a $1 billón durante el segundo semestre del año.

Por su parte, la base monetaria aumentó por encima de la emisión: $189.000 en el arranque de agosto, cifra que podría impactar en el tipo de cambio y la inflación. El ritmo de emisión monetaria comenzó a acelerarse con la cercanía de las elecciones legislativas, ya que durante el primer semestre el déficit fiscal fue de solo 0,5% del PBI y el Banco Central casi no tuvo que auxiliar al Tesoro.

Analistas estiman que la emisión continuará hasta diciembre próximo y la autoridad monetaria enfrentará un panorama complicado, con una gran masa de pesos adicional pero menos reservas, publicó el portal Infobae.

Según estimaciones del economista Gabriel Rubinstein, el Banco Central estaría utilizando US$25 millones diarios de sus reservas para contener al dólar: US$500 millones mensuales. "El Gobierno no inspira confianza. Hay muchos problemas en la economía argentina. A pesar de que digan que el dólar está alto, la gente prefiere ahorrar en dólares", evaluó Rubinstein. En lo que va de 2021, la base monetaria aumentó $500.000 millones, en parte por el repunte de la actividad económica.

Para el Gobierno, será clave enfrentar la aceleración de la expansión monetaria, que provoca un aumento del déficit fiscal: para ello, tras las elecciones, luce necesario apurar un acuerdo con el FMI, que permita evitar un salto del dólar, con el consiguiente impacto en la inflación y en la pobreza.

Además, para lograr un entendimiento con el Fondo Monetario, la Casa Rosada tendrá que garantizar una reducción del déficit, además de acelerar la devaluación del tipo de cambio oficial, que hoy es el del 1% mensual, muy por debajo de la inflación.