La secretaria de Energía, Flavia Royón, celebró la puesta en marcha del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner (GPNK) y sostuvo que “el gas de Vaca Muerta es mucho más competitivo y hasta seis veces más barato que el gas importado, además de ser un gas que, en cada molécula, contiene trabajo e industria argentina”.

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Así lo manifestó la funcionaria en su visita a la Estación de Medición (EMED) del kilómetro 0 GPNK, ubicada en la localidad neuquina de Tratayén, donde ayer se dio inicio al proceso de llenado. Durante la visita, Royón estuvo acompañada por Alejandro Monteiro, ministro de Energía de Neuquén, Damián Mindlin, presidente de SACDE, Gustavo Gallino, director general de Techint y Oscar Sardi, CEO de TGS, empresas encargadas de la construcción, operación y mantenimiento del proyecto.

Se estima que la puesta en marcha del Gasoducto permitirá la sustitución de importaciones que traerá aparejado un ahorro anual de US$ 4.200 millones. Sumado a esto, la construcción del segundo tramo y la Reversión del Norte –próxima a licitarse– habilitarán las exportaciones al norte de Chile y a Brasil, haciendo del sector energético la segunda fuente de generación de divisas de Argentina.

Desde la secretaría de Energía remarcaron que la construcción del primer tramo del GPNK se llevó a cabo en un tiempo récord de 10 meses. Respecto a este hito, la secretaria Royón reconoció el esfuerzo y el trabajo realizado para la culminación de la obra: “Queremos felicitar a los trabajadores que estuvieron involucrados, a las empresas contratistas, al Estado Nacional, a los Estados provinciales y a ENARSA. Fue un gran desafío que parecía imposible y las empresas argentinas, junto con el Estado nacional, fueron capaces de lograrlo”.

Asimismo, explicaron que el llenado del Gasoducto se realiza de forma gradual y por tramos, hasta completar los 25 millones de metros cúbicos de combustible necesarios para su puesta en funcionamiento. Este procedimiento es habitual en este tipo de sistemas porque involucra fases de barrido y presurización de las cañerías de forma progresiva.

Según el cronograma oficial, a la etapa que se inició ayer le seguirán otras cinco. A partir del próximo domingo 25 de junio, comenzará la segunda etapa que comprende el llenado del caño desde el kilómetro 29 hasta el 61, en tanto que la inauguración oficial del primer tramo está prevista para el 9 de julio próximo.

Fuente: Secretaría de Energía de la Nación

Por su parte, el presidente de ENARSA, Agustín Gerez, destacó la planificación, esfuerzo y disciplina de los argentinos: “Estamos muy orgullosos de haber logrado poner en funcionamiento en la fecha prevista este gasoducto que se construyó en tiempo récord, que sin dudas es el inicio de una nueva etapa para nuestro país” y agregó que “esto es prueba de la capacidad que tenemos los argentinos para hacer posible lo que se considera imposible”.

A su turno, Damián Mindlin, presidente de SACDE, señaló el desafío que fue la implementación de nuevas tecnologías para la construcción del GPNK: “La obra fue un enorme desafío, utilizamos equipos y tecnología inéditos en el país, realizamos capacitaciones en oficios y un gran esfuerzo logístico. Este gasoducto es un claro ejemplo de que cuando el Estado y el sector privado trabajan en conjunto, somos capaces de realizar las grandes obras que el país demanda.”

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En la misma línea, Gustavo Gallino, director general de Techint Ingeniería & Construcción, agregó: “Pudimos construir este gasoducto en menos de la mitad de lo que toma un proyecto de estas dimensiones en cualquier parte del mundo. Pudimos cumplir con los plazos, en parte por las capacidades de las empresas argentinas, pero también por el compromiso y profesionalismo de los trabajadores y sindicatos involucrados. Dimos capacitación a 50.000 trabajadores. Todo esto es capacidad instalada que queda en el país para futuros proyectos, además del ducto que es sumamente relevante para el desarrollo energético”.

Además, Mindlin, agregó: “La obra fue un enorme desafío, utilizamos equipos y tecnología inéditos en el país, realizamos capacitaciones en oficios y un gran esfuerzo logístico. Este gasoducto es un claro ejemplo de que cuando el Estado y el sector privado trabajan en conjunto, somos capaces de realizar las grandes obras que el país demanda”.