El director general del banco de inversión Morgan Stanley, James Gorman, estimó que existe un 50% de probabilidades de que la economía de Estados Unidos caiga en recesión, a raíz del endurecimiento de las políticas monetarias por la alta inflación. No obstante, el ejecutivo aclaró que "es poco probable que en esta etapa se entre en una recesión profunda o prolongada".

En una conferencia financiera organizada por su banco, Gorman consideró que la Reserva Federal de Estados Unidos (FED, por sus siglas en inglés) reducirá la inflación en el país, que trepó a más del 8,6% anual en mayo, la tasa más alta de los últimos 40 años.

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"No creo que estemos cayendo en un gran agujero en los próximos años. Creo que eventualmente la FED controlará la inflación", sostuvo el empresario. Sin embargo, aseguró que la FED esperó demasiado para subir las tasas de interés y esa actitud, dijo, da menos margen de maniobra en caso de que comience una recesión.

A su criterio, "estamos en este momento en una especie de 'Brave New World' (una referencia a 'Un mundo feliz', la novela de Aldous Huxley) y no creo que haya nadie en esta sala que pueda predecir con precisión dónde estará la inflación dentro de un año".

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Durante la semana pasada, la secretaria del Departamento del Tesoro, Janet Yellen, admitió que en su país "hay un riesgo de recesión". Pero la funcionaria explicó que, hasta el momento, "ningún elemento indica que una recesión se avecine".

También se conoció que el índice de precios al consumidor creció 8,6% interanual en mayo, el aumento más alto desde diciembre de 1981. Ese dato provocó que los principales índices bursátiles de Estados Unidos operaran con las mayores caídas de este año. En tanto, el rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense a dos alcanzaron su nivel más alto desde 2007 y por primera vez desde abril superó la tasa a 10 años, algo que podría indicar una recesión inminente.