Por Lucio Di Matteo

Gustavo Melella, gobernador de Tierra del Fuego, se fijó como objetivo sostener los niveles de producción y empleo de la industria electrónica de la provincia, no solo porque sirve en tal sentido, sino porque además considera que tiene "muy buenos niveles de competitividad y desarrollo, mucho más que el de otras regiones del país", según aseguró en diálogo con NA.

Antes de regir los destinos de la provincia, Melella fue intendente de Río Grande, la ciudad industrial al norte de isla, durante 8 años, y antes de eso fue justamente secretario de la Producción.

Desde la sanción del Presupuesto Nacional 2021 como ley, a fines de noviembre, se planteó que la suba de impuestos internos sobre productos electrónicos -6,5% a los producidos en Tierra del Fuego y 17% si son importados- podría trasladarse a precios. Por ello, apenas instalado el tema, el 30 de noviembre último, Melella le envío una carta al presidente Alberto Fernández. Allí el gobernador sostuvo que "desde el Gobierno provincial hemos convocado a todas las empresas del sector para minimizar el traslado a precios, evitando comportamientos oportunistas que vayan en detrimento del bienestar social".

Para ello, Melella le explicó al presidente que se inició un "mecanismo de monitoreo y seguimiento de los precios a la salida del territorio provincial". Después, realizada ya la reunión con representantes sectoriales, las industrias tomaron el compromiso de no trasladar la suba del impuesto sobre electrónicos a los precios.

El gobernador se mostró muy satisfecho en tal sentido, y se planteó como objetivo que todo el Gabinete Nacional conozca en detalle la situación. "El régimen industrial de Tierra del Fuego tuvo un gran objetivo que era geopolítico y se cumplió. Ahora, en términos industriales, la industria electrónica fueguina tiene un nivel de desarrollo altísimo, mucho más que en otras regiones del país".

El viernes pasado, Melella viajó hacia Capital Federal por primera vez desde el inicio de la pandemia, pues desde marzo se quedó en la provincia. "La firma del Pacto Fiscal, así como el pedido de 21 provincias sobre la conveniencia de suspender las PASO, eran dos motivos que bien valían la pena", le apuntó Melella a NA. También se mostró esperanzado porque en los próximos días lo reciban funcionarios del Gobierno Nacional, "para explicarles en detalle la situación de la industria en la provincia, que ya está mostrando fuertes señales de recuperación".

El salvataje de Brighstar y la necesidad del diálogo nacional

A fines de octubre, la multinacional Brighstar, que produce teléfonos celulares, planteó que se iba del país, dejando dos plantas sin funcionar y 526 empleados en la calle. Sin embargo, la gestión personal de Melella consiguió que una empresa nacional -Mirgor- se quedara con esa operación. En su pedido de ayuda al Gobierno Nacional hubo un primer momento sin respuesta, pero luego se activó todo.

Melella destaca el caso de Brighstar como "un trabajo conjunto entre empresarios y dirigentes gremiales, sin el cual no habríamos resuelto la situación". También destaca el caso de "Audivic, donde gracias al compromiso de BGH y la cooperativa de trabajadores, acompañados por el gobierno provincial, pudimos encaminar todo". Además cita el caso de la Textil Río Grande, donde se pudo evitar el cierre.

En cuanto a las empresas que acentúan su perfil exportador, en las últimas semanas se supo que Mirgor exportará los aires acondicionados que produce para automóviles y camiones a toda la producción de Fiat e Iveco en el Mercosur. "Este caso, como también la ampliación de nuestra matriz productiva, forman parte del perfil exportador que pretendemos acentuar para la provincia. Junto a las divisas que genera el turismo, Tierra del Fuego será uno de los mayores generadores de divisas para el país", afirmó Melella.

El gobernador, además, tomó el caso de Mirgor como una muestra del nivel de competitividad de la industria fueguina, donde además de los electrónicos se destacan la producción de muebles (con la apreciable madera de lenga, árbol típico de la isla), la textil y el envasado de crustáceos y moluscos, como por ejemplo la centolla.

Melella se queja porque, a su entender, "muchos hablan desde un escritorio de la ciudad de Buenos Aires y no pisaron nunca una industria de Tierra del Fuego". Y destaca que "la importancia geopolítica de Tierra del Fuego, de la cual depende la Antártida, debería superar un criterio meramente fiscal".

Con respecto al régimen de producción industrial, que tuvo hasta ahora condiciones promocionales, considera que "cumplió su primer gran objetivo, el geopolítico", pero considera que "ahora está para dar un salto productivo, y en eso estamos trabajando con el Gobierno nacional. Para ello necesitamos continuidad del régimen industrial y diálogo, pues en la Argentina hemos sufrido mucho cuando se interrumpieron procesos productivos".

Por otra parte, Melella señaló que "estamos trabajando fuertemente en la ampliación de la matriz productiva, lo estamos trabajando con el Presidente, con todo el Gobierno nacional. Vamos hacia una ampliación de la matriz no sólo en el régimen de lo tecnológico, vamos también hacia la industrialización del gas y el petróleo y el desarrollo de la industria del software".