Los hackers de criptomonedas se adueñaron de 1.900 millones de dólares en los primeros siete meses del 2022, lo que representa un incremento de 60% en comparación con el mismo periodo del año 2021, según informó la firma de inteligencia Chainalysis.

El año pasado los robos de criptodivisas alcanzaron los 1.200 millones de dólares en los primeros siete meses del calendario. Sin embargo, desde la empresa especializada hicieron énfasis en remarcar que a la hora de comparar hay que tener en cuenta que los volúmenes de transacciones de criptomonedas en lo que va del 2022, tanto para entidades ilícitas como legítimas, han bajado en comparación a julio del año pasado.

Aun así, en general la actividad delictiva ha sido más resistente: los volúmenes ilícitos bajaron solo 15% año tras año, en comparación con 36% de los volúmenes legítimos. Los especialistas atribuyen gran parte de estos robos al aumento de los fondos robados de los protocolos DeFi, una tendencia que comenzó en 2021, según sus propios registros.

Las estafas disminuyeron

Chainalysis reveló que los ingresos totales por estafas para lo que va de 2022 se sitúan actualmente en 1,600 millones de dólares, lo que implica un 65% menos de lo que había hasta finales de julio de 2021.

La mayor estafa de 2022 hasta el momento ha conseguido 267 millones de dólares en criptodivisas. En cambio, la mayor estafa del año pasado, fue el caso Finiko, que logró hacerse con 1.100 millones de dólares.

De acuerdo con Chainalysis, este descenso parece estar relacionado al criptoinvierno y la caída en precios de las criptomonedas. En ese sentido precisan que desde enero de 2022, los ingresos por estafas han caído más o menos en línea con los precios de bitcoin.

“A nadie le gusta un mercado bajista de criptomonedas, pero el lado positivo de esta situación es que la actividad ilícita ha caído junto con la actividad legítima”, expresaron desde la compañía de inteligencia.

Asimismo, la firma aseguró que la cantidad acumulada de transferencias individuales a estafas en lo que va de 2022 es la más baja de los últimos cuatro años.