Los bajos precios internacionales de los granos, la carga impositiva, los altos costos de los fertilizantes y los fletes a los puertos, hacen que los productores de Córdoba solo obtendrían rentabilidad si se dedican a plantar maíz temprano.

Así lo advirtió un informe de la Bolsa de Cereales de Córdoba que destacó que destacó los precios de los granos “continúan su tendencia bajista, operándose en niveles previos al comienzo de la pandemia”.

Es más, en ese marco, la soja, principal producto de exportación de Argentina “exhibe una caída más pronunciada que el maíz y el trigo”.

En el caso de la soja, se observaría una caída del 7% respecto el ciclo previo y la cotización se ubicaría en torno a los US$ 287 la toneladas, en el caso del trigo rondaría los US$ 206 “por debajo del precio observado durante la campaña 2023/24”. Para ambos cultivos, “los precios mencionados, se colocarían como los más bajos de las últimas cinco campañas”.

En cuanto al maíz, se esperaría una caída en la intención de siembra en Argentina, lo que brinda “un sostén al precio, el cual se mantendría en niveles similares a los del ciclo previo” en torno a los US$ 178 la tonelada para el maíz temprano y en US$ 174 Tn para el tardío.

El maíz temprano “tendría la mejor rentabilidad considerando los precios a los cuales se están negociando los contratos en el mercado de futuros”, sin embargo, "más del 80% de la producción cordobesa se siembra de manera tardía, cuya rentabilidad sería negativa”.

Por su parte la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) presentó sus primeras estimaciones para la campaña agrícola 2024/25, que arrojan una producción de 143,2 millones de toneladas de granos, lo que representaría un incremento del 9,3% respecto a la temporada anterior.

A los precios actuales, estas estimaciones “sugieren un ingreso de dólares por exportaciones del agro de 35.500 millones, superando los niveles de los últimos dos años” que fueron de US$ 30.800 millones y US$ 25.700 millones, respectivamente.